• 15/02/2010 01:00

Carnaval de los aumentos (I)

No se me enreda el teclado al momento de escribir estas cortas líneas. ¿Qué ventaja o beneficio le determina o depara al panameño los ca...

No se me enreda el teclado al momento de escribir estas cortas líneas. ¿Qué ventaja o beneficio le determina o depara al panameño los cacareados carnavales?

Una vez que los mismos se anuncian, suenan pitos y tambores, alegres murgas, serpentinas y colores al unísono de la farándula y de la mente creativa de otros, para ensalzar a más de cuatro connacionales que buscan en la diversión el desalojo de cuanta pasión pueda hallarse en nuestras mentes y corazones.

Los carnavales de por sí no son dañinos; es el contenido; es el resultado lo que cuenta. Al final tenemos entre 20 y treinta panameños que ya no circularan por las calles de Panamá. Carros maltrechos; brazos y piernas reducidos; quizás hogares destruidos; cuentas por pagar y los demás etcéteras. Pero no hay que arrepentirse de esto, porque, como dicen algunos, terminados los carnavales “ ¡limpios, pero contentos! ”.

Se trata del carnaval de los aumentos. En medio, en el ir y venir de la fiesta, hay de todo: aumenta el número de apuñalados, ahogados, heridos, lisiados o golpeados.

Aumenta el número de los que se inician en el cigarro, la droga, el alcohol o la cerveza.

Se infla o aumenta el vientre de padres totalmente irresponsables. Algunos dicen orgullosamente, es solo el producto de las circunstancias o de la ocasión; ¡hijos de la ocasión!

Aumenta, en una progresión geométrica, el consumo del ron o alcohol. Por lo mismo, también aumenta el número de hombres y mujeres que ponen su cabeza al nivel del suelo por causa de la borrachera.

Por supuesto, aumentan los ingresos o utilidades de las cantinas o bodegas.

Por ejemplo, en San Miguelito alguien esputó que existen cerca de 1000 establecimientos ocupados en estos menesteres. En la medida que hay más adictos, el negocio está asegurado.

*Educador.antolinoh@hotmail.com

Lo Nuevo
comments powered by Disqus