• 27/10/2015 01:00

Las Mercedes en Guararé

El pasado 18 de octubre fue publicado en este diario nuestro artículo: ‘Recuerdos de las Mercedes '

El pasado 18 de octubre fue publicado en este diario nuestro artículo: ‘Recuerdos de las Mercedes ', que contiene la historia de esta advocación mariana. Una ‘advocación mariana ' es una alusión mística relativa a apariciones, dones o atributos de la Virgen María. Existen dos tipos de advocaciones: las de carácter místico, relativas a dones, misterios, actos sobrenaturales, etc., y las apariciones terrenales, que en muchos casos han dado lugar a la construcción de santuarios, como el de Fátima, en Portugal, para citar solo uno.

En febrero de 2009 entrevistamos a don Ambrocio ‘Bocho ' Pérez Espino, entonces con 89 años, en Guararé (murió en 2012). Él nos contó cómo la Virgen de las Mercedes estuvo, por extraños sortilegios que él atribuía al Espíritu Santo, predestinada a ser la patrona de Guararé.

Todo empezó en España durante el reinado de Carlos V. (1788 - 1855), pues el papa santo de Roma mandó a unos misioneros a recorrer Europa y Centroamérica. Al llegar a España visitaron al rey. Los misioneros eran ecuatorianos y de apellido Fajardo. Además, eran ‘mercedarios ', es decir, de la Orden de La Merced. Una orden es un tipo de instituto religioso reconocido por la Iglesia Católica. Sus miembros desean lograr el objetivo común de dedicar formalmente su vida a Dios, unidos por un reglamento establecido por el fundador o por la Iglesia. El rey les preguntó por la imagen de La Merced, pero ellos no la tenían. Entonces el rey les regaló una pequeñita, para que la echaran en una maleta y la llevaran consigo. De Europa pasaron a Centroamérica.

Al llegar a Panamá desembarcaron por el puerto de Mensabé. Permanecían en Las Tablas. Un día que iban para La Villa de Los Santos, se encontraron con unas beatas que vivían en la barriada guarareña de Las Lagunitas. Les entregaron la imagen de la Virgen que les había regalado Carlos V. y la colocaron en una choza a orillas de la quebrada ‘El Espino ', donde vive hoy Ileana Espino. Por ser Las Lagunitas un lugar muy pantanoso, la mayoría de los moradores se trasladó al lugar donde está hoy la ciudad de Guararé. Allí le edificaron a la Virgen una capilla de quincha, donde está actualmente la iglesia.

Un día un hombre estaba quemando un potrero por los lados de la barriada ‘El Espavé '. La candela se pasó para el potrero de un señor rico que no perdonaba nada. El causante del incendio tendría que pagarle daños y perjuicios. El viento estaba alentando el incendio. El hombre pobre, solo, atribulado, metido entre las llamas tratando de apagar el incendio, invocó a la Virgen diciendo: ‘¡Virgen de las Mercedes, ayúdame por favor que estoy perdido! '. En ese momento, en medio del fuego se hizo un remolino que paró la candela. Así, pudo hacer abras con su machete y evitar que se propagara el fuego. Este fue el primer milagro que la Virgen de Las Mercedes hizo en Guararé.

Pedro Nolasco, en agosto de 1218, en España, tras una aparición de la Virgen, fundó la orden de la Merced, que lo exhortaba a redimir a los cristianos esclavizados por los musulmanes. Por eso, ella también es la ‘patrona de los detenidos '. Los guarareños recuerdan muchos milagros.

EDUCADOR

Lo Nuevo
comments powered by Disqus