• 06/10/2022 00:00

Acreditación universitaria, un sello de calidad

“[…] (se) pone de relieve la necesidad de unificar todos los entes y de crear y contemplar a futuro una Superintendencia de la Educación Superior [...]”

La acreditación y reacreditación universitarias son un sello de calidad que debe distinguir a las instituciones de educación superior en nuestro país y el mundo, por tanto, debe ser digno de reconocimiento por parte de la sociedad y el entorno de aquellas universidades que gozan de tal alta distinción y reconocimiento.

En Panamá el Consejo Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (Coneaupa) es el organismo evaluador y acreditador para el mejoramiento de la calidad de la educación superior universitaria en Panamá, creado mediante la Ley 30 de julio del 2006 y derogado por la Ley 52 de junio de 2015, que crea el Sistema Nacional de Evaluación y Acreditación para el Mejoramiento de la Calidad de la Educación Superior Universitaria de Panamá.

Concebimos un sello de calidad integral, luego de pasar los rigurosos procesos de acreditación en los factores que componen la matriz de evaluación de las universidades, como institucional, académico, vida universitaria e infraestructura y es así que nuestro país, desde el año 2012, había quedado en deuda para someter a las instituciones de educación superior a su proceso de reacreditación, que debió realizarse en el año 2018 y que, por razones presupuestarias y otras desconocidas, no se realizó en la fecha programada.

Esta situación preocupa altamente, por cuanto la calidad universitaria debe estar íntimamente ligada a las políticas públicas del Estado y las necesidades del sector productivo, así como también a la vinculación de la internacionalización de las universidades y el enfoque de país hacia las nuevas profesiones, para mejorar la competitividad con el resto del mundo.

En ese sentido, el retraso en la acreditación universitaria y los años perdidos en la pandemia ponen de relieve una reacreditación universitaria con 10 años de evaluación pendiente, que debemos ver como una oportunidad para mejorar el sistema y ajustarlo a las nuevas necesidades pospandemia, vinculando a todos los sectores de la sociedad relacionados a la educación superior para innovar y mejorar los procesos de acreditación y reacreditación universitaria.

Que el Estado, las empresas, padres de familia y la sociedad reconozcan aquella universidad acreditada y reacreditada como una institución de educación superior que asegura alta calidad en sus procesos y metodologías de enseñanza y que cumplen con los estándares de acreditación institucional y que aseguran las competencias de enseñanza en su cuerpo docente, administrativo y la inclusión en su infraestructura.

Luego de dos (2) años de pandemia, donde las clases universitarias se impartieron de manera virtual, es justo contemplar adecuaciones a la matriz de evaluación de acreditación universitaria vigente, la cual debe vislumbrar que la virtualidad llegó para quedarse en el sistema de educación superior.

Las universidades deben prestar atención y contar con plataformas educativas robustas, que permitan una constante interacción con los estudiantes, con factores medibles de ponderación y comunicación administrativa, docentes y autoridades que pueda ser objeto de evaluación en los factores de evaluación universitaria. En ese sentido, las matrices de evaluación de calidad deben contemplar un factor adicional para medir la virtualidad que fue un factor determinante en la educación superior del mundo.

Al contar la sociedad con mecanismos que permitan identificar las universidades que han alcanzado los altos niveles de calidad, a través de la acreditación y reacreditación universitaria, reconocerá distinguir las mejores universidades del país no solo por su posición en el ranking mundial, sino también por ese sello de calidad que otorga Coneaupa, que debe ser reconocido como un sello de integridad y calidad comprobada.

Aunado a lo anterior, es importante mencionar que el esfuerzo en conjunto que realiza Coneaupa por lograr la identidad del sello de calidad integral de la educación superior de la mano del excelente trabajo que realizan el Consejo de Rectores y la Comisión Técnica de Desarrollo Académico (CTDA) cada uno en sus áreas y el Meduca a través de una oficina de Tercer Nivel, que ve los temas universitarios, pone de relieve la necesidad de unificar todos los entes y de crear y contemplar a futuro una Superintendencia de la Educación Superior, que no solo integre todos los contenidos relativos a las universidades oficiales y particulares, sino todos los temas relacionados a la educación universitaria en Panamá.

Doctor en Educación.
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