• 13/05/2025 00:00

Darién, camino de migrantes

La idea de una línea ferroviaria entre Panamá y Colombia eliminaría el llamado tapón del Darién y facilitaría la migración de personas procedentes de Sudamérica hacia Centroamérica y Estados Unidos

Darién, provincia olvidada por los gobiernos nacionales, con una superficie de 16.803 Km² que la convierte en la provincia de mayor tamaño del país (22,2 % del total de la superficie nacional), conformada por dos distritos: Pinogana y Chepigana, y la comarca Emberá-Wounaan y la comarca Wargandí, estas comarcas poseen niveles de pobreza total del 98% y extrema de 89,7 %.

El tapón del Darién, conocido por interrumpir la carretera Panamericana en un tramo de 100 Km, a pesar de esta dificultad se ha convertido en los últimos años en una ruta importante de tránsito para la migración irregular que se dirige a Estados Unidos, proceso irregular de migrantes que se inició en la década de 1990, con colombianos que huían del conflicto interno y la violencia.

Las autoridades panameñas llevan rastreando algunas llegadas de migrantes desde 2010, y hay casos registrados de cruces desde hace más de una década. Sin embargo, hasta 2021, el número de personas que cruzaban la selva era relativamente intrascendente en comparación con otras vías migratorias de las Américas. Ese año, más de 130.000 migrantes lograron cruzar la selva a pie, frente a una media de menos de 11.000 al año durante la década anterior. En 2022, las llegadas se dispararon a casi 250.000 personas. Esa cifra se superó en los ocho primeros meses de 2023, y más de 500.000 personas estaban en camino de cruzarlo a finales de 2024. Los gobiernos de ambos lados de la frontera acordaron abordar la migración que ocurría a través del Darién. No obstante, para este año 2025, con control militar en las fronteras y la activación de deportaciones masivas de migrantes, a través del Darién, hoy se puede afirmar que el paso de migrantes ha disminuido en un 98 %. Sin embargo, ya se habla de cierres de los centros migratorios en el Darién y de las deportaciones masivas, lo que prevé un aumento regular de las migraciones por el tapón del Darién.

Sin embargo, con la visita del presidente colombiano Gustavo Petro a Panamá (28 de marzo), se tocó el tema de conexión ferroviaria entre ambos países, sobre el tapón del Darién, inversión muy cuantiosa, especialmente por las dificultades topográficas y ambientales por atravesar el tapón del Darién.

Proyecto que generaría grandes beneficios para ambos países, no solo regulando y confrontando a las organizaciones ilegales que han hecho de la migración irregular un cuantioso capital de ganancias, sino empezar a legalizar el paso de migrantes por la frontera Panamá-Colombia, como también generar empleo por la construcción de la línea férrea. Es importante afirmar que el sector turístico, de ambas partes, generarán gran utilidad con esta línea férrea. Es posible que la inversión nacional e internacional aumente su presencia en esta zona con hoteles, aeropuertos, muelles turísticos, etc.

Hoy, para cruzar el tapón del Darién, los migrantes salen de Necoclí, en Colombia. Ahí embarcan y cruzan el golfo de Urabá hasta la localidad también colombiana de Acandía y entonces penetran en la selva hasta llegar a San Vicente en Darién, donde el Gobierno de Panamá ofrece asistencia a los migrantes. Cada migrante debe desembolsar unos 350 dólares si quiere tener derecho a pasar. Un número indeterminado de personas ha muerto en estos años víctima de los peligros de la selva, crecidas de ríos y atracos y violaciones de bandas de delincuentes. También tienen estaciones de recepción migratoria temporales en ambas fronteras, donde se toman datos biométricos de los migrantes y se ofrecen servicios sanitarios y de alimentación. Después son transportados a otro centro cerca de la frontera de Costa Rica.

Entre el 1 de enero y el 28 de febrero de 2025, se documentaron 13 eventos de desplazamiento forzado masivo, que afectaron a 1.205 familias, lo que equivale a 3.666 personas. Adicionalmente, se registraron 16 eventos de confinamiento, que impactaron la movilidad de 2.551 familias en 64 comunidades

Con la línea ferroviaria, se reduce la obstrucción del área del Darién para pasar por tierra de Sudamérica a Centroamérica, se rompe un dique que antes contenía a la migración sudamericana con mínimos recursos de intentar llegar a pie a Estados Unidos (también a la caribeña que se trasladaba a Sudamérica).

*El autor es economista
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