- 03/03/2010 01:00
Reino de Dios
¿Quién quiere ir al cielo?, muchos dicen “yo”, pero, ¿quién quiere morir?, “sin comentarios”. Un sabio pensador dijo que los seres humanos son ellos más sus circunstancias, pero, ¿qué sentido tiene asirnos de lo que no podemos controlar?
Nos desenvolvemos en el ámbito espiritual y el material, pero, no hacemos los equilibrios correspondientes. Múltiples textos sagrados describen el pensamiento divino con respecto a la actitud y aptitud que debemos asumir con respecto a los bienes materiales, los cuales son temporales, depreciables e impredecibles.
No desconocemos que ostentamos el privilegio, necesidad y responsabilidad de administrar y disfrutar los bienes materiales, pero, más que esto, debemos administrarnos a nosotros mismos. (“ ¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo y perder su alma? ”). Hay que descifrar y redescubrir el mensaje del pesebre, y de la vida austera, muerte y resurrección de Jesús.
Surge la siguiente interrogante: ¿Cuál es el significado y alcance del “ Reino de Dios ”? Los bienes materiales son consecuencia de este Reino, pero no son su causa ni su fin. Jesucristo, en la antesala de su crucifixión, al hablar con el prefecto romano Pontivs Pilatvs, dijo “ mi Reino no es de este mundo ”.
Estas palabras, más que un recuento literario o religioso, tienen una aplicación diferente al consumismo, mercantilismo, utilitarismo y especulación de la sociedad postmodernista y sincretista.
“ Jesucristo es el mismo ayer, hoy y por los siglos ”, es decir, Dios no cambia. La Palabra Suprema dice “ cielo y tierra pasarán, más las palabras del Señor no pasarán ”. El Libro Divino afirma que la tierra será transformada de la corrupción y el “ sin sentido ” moral, espiritual y natural a la que está sometida. “ La naturaleza espera la manifestación gloriosa de los hijos de Dios ”. ¿Cuándo comenzó esta manifestación? Ya comenzó desde el día en que adoptamos la cosmovisión divina como nuestra, pero, lo que se espera, para hacerla gloriosa de verdad, es el retorno a la tierra del Maestro Divino.
¿Cuál es o debe ser la prioridad de los seguidores de Jesús? “ Id y haced discípulos ”, “ hacer justicia, amar misericordia y humillarnos ante Dios ”, “ arrepentimiento y conversión ”, “ temer a Dios y guardar sus mandamientos ”, “ visitar a las viudas y huérfanos, y abstenernos de toda especie de mal ”, “ creer en Dios de verdad para que fluyan los milagros, señales y prodigios ”, y la suma de todo: “ Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a uno mismo ”.
La lista de ordenanzas, principios y mandamientos de Dios, vista en un sentido holístico, es suficientemente clara en lo que respecta a lo que debemos hacer, cuándo, dónde y cómo. “ Busca primero el Reino de Dios y su justicia, y todas las demás cosas serán añadidas ”.
*Abogado.gadarovi@gmail.com