• 06/12/2008 01:00

‘Los peligros de Nyoka’

Cuando era muchacho, en Río Abajo, me fascinaba el cine —especialmente los “episodios”. En aquel entonces yo vivía al lado del prostíbul...

Cuando era muchacho, en Río Abajo, me fascinaba el cine —especialmente los “episodios”. En aquel entonces yo vivía al lado del prostíbulo Fénix. Para poder satisfacer mi fascinación por el cine, recogía y cambiaba las botellas de cerveza que tiraban por el balcón los soldados norteamericanos borrachos. ¡Qué peleas entre mis hermanos y yo por esas botellas! Luego, todos los martes, íbamos al Teatro Ideal del “chinito” Lowe a gritar “mongo” y disfrutar de películas como “El misterioso Dr. Fu Manchu” o “Los peligros de Nyoka”.

Al observar a Barack Obama presentar su nuevo equipo de seguridad, no sé por qué me acordé de mi juventud y el enamoramiento de mi generación con el cine “gringo”. Tal vez también me acordé de que “Nyoka”... la estrella, la “star girl” siempre lograba, con la ayuda de sus amistades, escaparse de las dificultades en que caía. Y me preguntaba si estábamos observando el inicio de “Los peligros de Barack Obama”.

En los episodios los “héroes” confrontan numerosos desafíos y sus vidas siempre están en jaque. Actualmente, como en el cine, a soto voce , la vida de Obama está en peligro. La emisora CNN recientemente anunció que él ha recibido más amenazas en contra de su vida que cualquier presidente electo en la historia de EUA. Viajando hacia Panamá estuve sentado contiguo a un canadiense jubilado del servicio extranjero, quien hablando de Obama, comentó que estos eran los momentos más vulnerables para Obama, porque si algo sucede no existe un mecanismo para reemplazarlo. ¡Bush todavía es presidente! Sin mecanismo, nuevas elecciones serían necesarias. En Alabama dos estudiantes, uno blanco y el otro negro, fueron obligados por el conductor a bajar del bus escolar por mencionar el nombre de Obama. Para algunos eclesiásticos el haber votado por Obama fue pecar. Finalmente, cuando estoy escribiendo este artículo aún está pendiente el que la Corte Suprema fallara sobre la legalidad de su nacionalidad.

Eso es a nivel personal. ¡Imagínense los “peligros” a nivel nacional e internacional! El próximo año el tratado nuclear con Rusia caduca. India y Pakistán poseen armas nucleares y están ansiosos de enfrentarse. Irán y Corea del Norte coquetean con armas de destrucción masiva. No dejemos a Israel afuera de este baile macabro y la “no resolución” del conflicto con Palestina y el mundo árabe. ¡No nos olvidemos de Afganistán e Irán! Uno arde y el otro está por arder. ¡La posibilidad de un Apocalipsis termonuclear o biológico cuelga como la espada de Damocles sobre nuestras cabezas! No he mencionado la crisis económica con los augurios negativos que se vislumbran ni tampoco los problemas ambientales del planeta. Obama, en buen panameño, tiene “peligros pa’ rato”. Un chiste sardónico dice que “la gente blanca defecó sobre el país y dejó la limpieza al negro Obama” Llyn Roberts en su libro “The Good Remembering” escribe: “Vivimos en un mundo de profunda oportunidad. Leyendo los periódicos podemos sentirnos abrumados por las crisis diarias... Sin embargo, sabemos que la crisis y el caos pueden ser ingredientes cruciales para darnos perspectiva e impulsar el cambio”

Después del júbilo y la euforia de su victoria ¿podrá Obama, como Nyoka, escaparse en el último capítulo? ¡Dios quiera que sí!

*Docente y escritor panameño residente en Nueva York.cerussman@yahoo.com

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