Patriotismo: sentido de patria

En noviembre, Panamá conmemora una de las fechas más importantes en su historia: la separación de Colombia, ocurrida hace 109 años. Por ello, celebramos tan importante hecho histórico, año tras año, con diversas manifestaciones patrióticas: dianas, desfiles, bandas musicales, batallones bien uniformados y sincronizados, participación de entidades cívicas, escolares y gubernamentales, padres de familia y docentes en delegaciones, grupos folclóricos y autóctonos que presentan nuestra música, bailes y trajes típicos, ciudadanos y extranjeros como espectadores deleitándose de tradiciones históricas tan nuestras, que nos identifican como nación democrática y puente del mundo.

Todas estas expresiones de respeto a la patria deben llevarnos siempre a una reflexión permanente del patriotismo que debemos sentir dentro, con amor y respeto por nuestro país. Ese sentimiento que llevamos internamente por la tierra que nos vio nacer o que se adopta por voluntad propia desprende enseñanzas, valores, cultura, historia, costumbres y tradiciones muy particulares.

Las acciones llamadas patrióticas son acciones que sirven para mostrar el amor que tiene uno hacia su patria, tales como izar nuestra bandera correctamente, cantar el Himno Nacional, declamar o recitar poesías alusivas al tema, participar de los desfiles o defender y apoyar al país al que pertenecemos por medios idóneos que demuestren nuestra educación, cultura, idiosincrasia y sentido de pertenencia a este pedazo de tierra istmeña tan querido por nosotros.

Panamá tiene una rica historia que debe ser conocida por cada panameño, sin excepción alguna, desde sus incipientes luchas hasta su completa obtención del control de su territorio. Esto no implica recitar al detalle, como si de memoria se tratara, cada fecha o acontecimiento en su justa medida; por el contrario, se trata de saber qué sucedió, cómo ocurrió, cuándo se dio, quiénes fueron sus gestores, sus causas, consecuencias y su importancia para el desarrollo nacional.

Este conocimiento no significa imponer el patriotismo en las personas, sino mantener el interés permanente de los padres de familia y los educadores, de educar al menor desde temprana edad a amar a su patria y a respetar los símbolos patrios. Este compromiso es de todos, ya que por mínima demostración de patriotismo que hagamos, estamos motivando a otros a sentir de alguna manera, lo mismo que proyectamos: PATRIOTISMO PURO Y SIMPLE.

Esto conlleva al compromiso constante de revisar los textos escolares que dedican su contenido a la historia patria, para que reflejen siempre la realidad de los hechos y acontecimientos, tal como se dieron, sin apasionamientos y desenfrenos y mantener vivo ese sentimiento de patria que nos ha unido hasta en los momentos más difíciles vividos por la defensa de nuestra democracia.

Practiquemos el patriotismo respetando nuestros Símbolos Patrios tal como fueron adoptados por sus autores, siendo cuidadosos y recelosos de la forma en que se representan, reproducen, utilizan, colocan o portan, porque su uso está reglamentado y no deben ser objeto de un mero medio publicitario o de venta masiva, que sólo dé colorido a vehículos, calles, avenidas, edificios, entre otros, sino que demuestre nuestro verdadero orgullo nacional.

La garantía del uso adecuado de los Símbolos Patrios depende de cada uno de nosotros y en especial, de las autoridades panameñas, quienes deberán actuar como lo haría un ‘buen padre de familia’.

Demos valor a nuestras costumbres en cada región del país y a la historia nacional tal como se dio, dando crédito a cada personaje dentro del entorno de los hechos ocurridos.

¡Panamá! Divino tesoro, territorio de oportunidades y tradiciones. Celebremos juntos con sentido de patria, tan importantes fechas nacionales.

ABOGADA Y ROTARIA.

—APORTE DE LA COMISIÓN DE VALORES DEL CLUB ROTARIO DE PANAMÁ.