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- 02/09/2025 23:00
Bajo la dirección del Dr. Mario Galindo y el Licdo. Francisco Young, quienes fueran ministro de Hacienda y Tesoro y director general de Ingresos, respectivamente, en el gobierno de Guillermo Endara, se estableció en Panamá por primera ocasión la Lotería Fiscal mediante Decreto Ejecutivo N° 169 de 23 de septiembre de 1992, que a su vez aprobó la Resolución N° 11 de ese mismo año, dictada por la Junta de Control de Juegos, mediante la cual se estableció y reglamentó el sistema de sorteo con base en facturas o documentos equivalentes.
Esa iniciativa se fundamentó en la baja recaudación de impuestos, la evasión fiscal existente y en que estudios realizados por el Ministerio de Hacienda y Tesoro indicaban que con la ejecución de un programa de premiaciones se promovería la fiscalización por parte de la ciudadanía y el cumplimiento correcto de las normas sobre documentación de operaciones por las personas obligadas a emitir facturas o documentos equivalentes.
Por otra parte, los estudios indicaban que esta fiscalización se traduciría en un aumento significativo en las recaudaciones de los impuestos a las ventas y servicios, así como de los impuestos que recaían sobre los obligados a documentar sus operaciones, tales como el Impuesto sobre la Renta y el Impuesto de Timbre.
El objetivo principal del programa de premiaciones establecido mediante el primer sistema de sorteo con base en las facturas, fue el aumento de las recaudaciones que se logra con la correcta documentación de las operaciones de venta de bienes y prestación de servicios, estimulando al público consumidor a exigir la entrega de los comprobantes que manda la ley, registros que permiten la adecuada gestión fiscalizadora por parte de la Administración Tributaria.
Efectivamente, los estudios no estaban equivocados; luego del primer sorteo de la Lotería Fiscal, las recaudaciones aumentaron significativamente lo que justificó con creces el costo para el Estado de un sistema de sorteo con base en las facturas, costo que resultó muy inferior al de incrementar los recursos humanos de la Dirección General de Ingresos para alcanzar el grado de fiscalización que se logró con la participación de los consumidores a través del sorteo.
No obstante lo anterior, esta positiva iniciativa del Dr. Mario Galindo y el Licdo. Francisco Young fue desechada con el cambio de gobierno que entró en funciones el 1 de septiembre de 1994, tal como ha ocurrido con varios gobiernos en nuestro país que no dan continuidad a los proyectos del gobierno que antecedió, muchas veces generando perdidas de recursos, oportunidades y desaprovechando el trabajo ya realizado.
Después de 33 años de la primera Lotería Fiscal, el actual gobierno, mediante Decreto Ejecutivo n.° 26 de 2 de junio de 2025, instituyó la Lotería Fiscal como sorteo oficial, lo cual es una buena iniciativa para lograr incrementar las recaudaciones de impuestos. El primer sorteo se llevó a cabo el jueves 28 de agosto.
Igual que la primera Lotería Fiscal, esta versión ofrece B/. 110,00.00 en premios por sorteo, lo que es muy atractivo para atraer a los consumidores para que participen. No obstante, a diferencia de la primera Lotería Fiscal de 1992, los consumidores se quejan de que no ha habido suficiente divulgación sobre las reglas del juego, es decir, cuántas facturas debe llevar cada sobre, requisitos de las facturas, información que debe llevar cada sobre, período de emisión de las facturas para cada sorteo, tiempo límite para depositar en los buzones los sobres para los sorteos, y la ubicación exacta de los buzones. También los consumidores se quejan que se ha publicado información incompleta, lo que podría conllevar el posible rechazo o anulación de sobres; todo lo anterior se puede corregir para futuros sorteos.
En la primera Lotería Fiscal de 1992, para el sorteo se creó un nombre pegajoso para fines publicitarios, que se denominó “La Bille Tómbola Fiscal” y también se creó un atractivo y amigable personaje que aparecía en los comerciales y en toda la publicidad el cual se llamó “Don Billetón”.
Previo a cada sorteo se realizaba una campaña publicitaria en prensa, radio y televisión para incentivar a los consumidores a participar en los sorteos e informarles en detalle las reglas del juego; la campaña servía para educar a los consumidores para que siempre exigieran la respectiva factura al momento de realizar una compra o recibir una prestación de servicio; también la campaña estaba dirigida a informar a los consumidores sobre las obligaciones fiscales y sobre los requisitos que debe contener una factura; difundía ampliamente la ubicación de los buzones y un número de teléfono para consultas y quejas; se anunciaba la fecha de los sorteos que se llevaban a cabo de manera pública en un centro comercial en presencia de notario, un representante de la Junta de Control de Juegos y otros funcionarios. Además, el sorteo se transmitía en dos canales de televisión con cobertura nacional y se publicaban los resultados en diarios de circulación nacional.
Bienvenida nuevamente a Panamá la Lotería Fiscal.