• 05/08/2020 00:00

Salud y jubilaciones de primera

Opinión editorial del 5 de agosto de 2020

En Canadá o los países nórdicos, las personas que llegan a la edad de jubilación se sienten satisfechas de la labor cumplida. Trabajan por largos años y luego viene el disfrute, porque, aparte de gozar de excelentes sistemas de salud, tienen garantizada una remuneración que les mantendrá viviendo muy bien. Muchos, incluso, pueden irse a vivir a los paraísos destinados para pasar la vejez y curiosamente hasta uno de ellos queda en Panamá. La pregunta es ¿por qué los panameños no podemos aspirar a tener una jubilación como los noruegos o canadienses? ¿Por qué tenemos que seguir con un sistema de salud tan caótico como el que tenemos? Lo peor es que, a diferencia de los jubilados noruegos y canadienses, los nuestros no quieren dejar el empleo, porque el recorte que les viene es tal que no les permite vivir, al contrario, la jubilación no te alcanza para pasar la vejez en paz. ¿Queremos seguir con este sistema perverso de salud y jubilaciones? Por supuesto que no. El diálogo que se impone para salvar la Caja de Seguro Social y su programa IVM, debe ser más allá de perpetuar esas jubilaciones miserables. Todos, como sociedad, tenemos que hacer el esfuerzo por tener un sistema de salud de excelencia y un sistema de pensiones que verdaderamente nos permita vivir la vejez como canadienses y noruegos. ¿Que si es difícil?, es lo de menos, lo peor es no aspirar a tener algo mejor y renunciar a que podemos lograr todo lo que nos proponemos. ¡Así de simple!

Lo Nuevo
comments powered by Disqus