Aperturas necesarias

El anuncio que hace el Ministerio de Salud (Minsa), con los datos sobre la pandemia, ha convertido en cotidiana y, a veces, hasta descuidada la atención que la ciudadanía presta a la cantidad de personas fallecidas por la COVID-19. Son más de 6700 panameños y panameñas que han perdido sus vidas en estos poco más de quince meses. La apuesta para contener significativamente la pandemia pasa por el cumplimiento del programa de vacunación. Pero, como las consecuencias de este largo periodo de encierros, cuarentenas, toques de queda y restricciones, no son exclusivamente de salud, ha llegado el momento de reclamar mayor proactividad por parte de las autoridades, a fin de generar aperturas. Se ha dicho mucho que la nueva normalidad sería segmentada. Ejemplo de ello es el recién firmado acuerdo binacional entre Costa Rica y Panamá, que busca permitir a los trabajadores de la industria bananera transitar a través del área fronteriza. Allí están fijados los controles de bioseguridad y la promoción de la vacunación para “solucionar un poco la fluidez laboral en el sector fronterizo”, según la viceministra Ivette Berrío. Bienvenido que panameños y costarricenses en esa área tengan mayores libertades para laborar. Ahora, corresponde multiplicar este ejemplo y que se realicen de manera sostenida aperturas por áreas geográficas o sectores productivos.