Cuando el río suena...

No es idea novedosa que los gobiernos busquen las formulas para controlar los medios de comunicación social, instituciones que tienen la capacidad de contribuir a formar opinión pública. Estos intentos se fortalecen durante las campañas políticas, donde muchos candidatos quisieran que los medios tuviesen siempre a su disposición. Es por ello que no podemos desconocer las intensiones de dirigentes gubernamentales de modificar las leyes de prensa, a pesar de que algunos de sus copartidarios declaren que no comulgan con esa idea. Basta recordar que la aplanadora oficialista no siempre actúa por iniciativa propia sino siguiendo directrices del ejecutivo. Las opiniones aisladas de los diputados carecen de valor al momento de recibir instrucciones superiores. Es por ello que debemos estar vigilantes para evitar goles de media cancha, porque cuando el río suena…