No tanto sigilo

Muy inquietante el anuncio de las autoridades sobre un posible complot contra el presidente Ricardo Martinelli. Al notable incremento de la inseguridad que perciben los ciudadanos del común en el día a día, se suma ahora la alarma generalizada que ocasiona una eventual amenaza contra el primer mandatario, sobre la cual sólo han circulado rumores y confusas versiones que poco contribuyen a la tranquilidad pública. Desafortunadamente la parquedad y el hermetismo del gobierno, lejos de generar calma, dejaron la sensación de que se trata de algo grande. Aunque entendemos la necesaria reserva que requiere una investigación tan delicada, la gravedad del asunto exige, en nuestra opinión, que el tema se maneje con mayor claridad y se informe a los ciudadanos de la verdadera dimensión de las amenazas que se ciernen contra la seguridad del Estado y en particular contra su máximo representante.