- 06/02/2010 01:00
PANAMÁ. Los trabajos de cosecha agrícola en el vecino país de Costa Rica se han convertido en una fuente de empleos para los indígenas panameños, especialmente los de la Comarca Ngöbe Buglé.
Es un éxodo migratorio cuyo control en la frontera ha tenido que ser reforzado, pues muchos indígenas cruzan ilegalmente con sus familias y, además, lo hacen con niños en brazos o que aún no se valen por sí mismos, lo cual los expone a altos riesgos de salud porque muchos duermen a la intemperie y muchas veces no pasan por exámenes médicos debido a la ausencia de puestos de salud en estas regiones.
Ante la situación, el Servicio Nacional de Migración de Panamá (SMN), reveló un informe sobre el traslado de estos panameños a Costa Rica durante el 2009, para empezar a ver la dimensión del problema en cifras.
El documento oficial indica que más de 13 mil indígenas panameños de la etnia Ngöbe Buglé recibieron salvoconductos para viajar a Costa Rica y participar en labores agrícolas en 2009.
De dicha cantidad, 8 mil 852 indígenas utilizaron los puestos de control de Río Sereno, en el distrito de Renacimiento, y 4 mil 429 lo hicieron por Paso Canoas, en el distrito de Barú, para salir del país hacia territorio costarricense desde la occidental provincia panameña de Chiriquí, según un comunicado del SMN.
El año pasado, durante los cuatro últimos meses, se incrementó el número de indígenas que usaron el puesto de control migratorio de Río Sereno, ya que la mayoría (7,996 personas) cruzaron al lado tico desde dicho punto.
No obstante, el informe señala que en Paso Canoas, los meses de mayor afluencia de braceros (indígenas que laboran en las cosechas) fueron octubre (1,553) y diciembre (1,426), debido a que se trata de los meses en que inicia la cosecha de café.
El informe de Migración agrega además que en enero de este año (2010), en la regional de Chiriquí, otorgó 481 salvoconductos a indígenas ngöbes que buscan trabajo en labores de cosecha.
En mayo del año pasado (2009), los gobierno de Panamá y Costa Rica firmaron un acuerdo para facilitar el ordenamiento y control de la migración de la población indígena panameña Ngôbe Buglé que cruza la frontera.
El acuerdo conjunto compromete a los gobernantes de ambos países a crear un Comité Técnico Permanente, con el objeto de ordenar, encauzar y controlar los movimientos migratorios con fines de empleo de estos trabajadores y sus familias.
Los indígenas trabajan temporalmente en la zafra de café que se desarrolla todos los años específicamente en la zona Atlántica Sur de Costa Rica, en la región Bribri-Sixaola y la ruta migratoria de San Vito de Coto Brus, Pérez Zeledón y la zona de Los Santos.