Para reinventar los fuertes canaleros de la costa de Colón

Expertos debatieron sobre el presente y el futuro de estos lugares en el conversatorio ‘Fortificaciones del siglo XX en la antigua zona del Canal y su integración en la trama urbana de la ciudad de Colón'

El conversatorio ‘Fortificaciones del siglo XX en la antigua Zona del Canal y su integración en la trama urbana de la Ciudad de Colón' tuvo como objetivo discutir y establecer alternativas para reinventar y preservar estas instalaciones que aún se encuentran visibles en la provincia de Colón. A pesar de formar parte de la historia panameña, muchas no son conocidas o poco estudiadas.

‘LA PROVINCIA DE COLÓN HA ESTADO REALIZANDO EN ESTOS ÚLTIMOS AÑOS DINÁMICAS PARA INVOLUCRARSE EN TEMAS RELACIONADOS A LA CULTURA',

JOEL CERAS FRUTO,

ARQUITECTO

Este evento fue organizado por la Fundación Ciudad del Saber, la Asociación de Antropología e Historia e ICOMOS Panamá. Como parte de su trabajo de fomentar la conservación de los patrimonios históricos culturales, ICOMOS congregó a los expertos Guillermo Castro Herrea, que habló sobre ‘El país canalero y su integración territorial: paisaje de la antigua Zona del Canal y conversión'; el arquitecto Gerónimo Espitia Subía, cuya ponencia versó sobre el ‘reordenamiento territorial de la Zona del Canal y la Ley N°21 de 1997', y arquitecto Joel Ceras Fruto, quien debatió sobre el ‘Patrimonio fortificado de la ciudad de Colón, normativas y amenazas'.

En su exposición, Castro manifiestó que las fortificaciones forman parte de un proceso histórico en épocas coloniales, ya que fueran creadas como un sistema de defensa iniciado por la Corona Española, que buscaba salvaguardar el tránsito de los tesoros que pasaban por el corredor del Chagres. Estados Unidos retomaría la iniciativa, con la finalidad de proteger el recién inaugurado Canal.

‘LA VALORACIÓN QUE HAGAMOS DE LA PROPIA FORTIFICACIONES DEPENDERÁ DE LA SOCIEDAD, EN QUE PUEDA SUPERAR EL LEGADO DEL ENCLAVE MILITAR QUE DEJÓ LOS EE.UU'.

GUILLERMO CASTRO ,

ASESOR EJECUTIVO

‘La valoración que se desarrolla en base a las fortificaciones va a depender de la medida y la capacidad que tenga o no la sociedad panameña de superar el legado de dependencia, desesperanza aprendida y anualidad extrema que nos dejó el enclave militar como parte del protectorado en el periodo de 1903 a 1999', añadió.

Por su parte, el arquitecto Fruto explicó que el fuerte Sherman, que tenía como propósito resguardar la costa atlántica durante el siglo XX, hoy en día se encuentra cubierto por la tupida selva tropical del Parque Natural de San Lorenzo, en un total estado de abandono. ‘Por su posición geográfica se mantiene alejado de la ciudadanía y del impacto de desarrollo urbano. Un factor en desventaja, debido a que genera un des interés por parte de la ciudadanía y las entidades', indicó.

CONVERSATORIO

El evento fue organizado por la Fundación Ciudad del Saber, la Asociación de Antropología e Historia de Panamá e ICOMOS Panamá

Guillermo Castro Herrea, habló sobre ‘el país canalero y su integración territorial: paisaje de la antigua Zona del Canal'.

El arquitecto Gerónimo Espitia Subía dialogó sobre ‘el reordenamiento territorial de la Zona del Canal y la Ley N°21 de 1997'.

El arquitecto Joel Ceras Fruto presentó una ponencia sobre el patrimonio fortificado de la ciudad de Colón.

El fuerte Sherman es conocido por ser uno de los cuatro fuertes construidos por el gobierno norteamericano para la defensa de la ruta en el Caribe. Fruto señala que un ejemplo claro de cómo reivindicar lugares antiguos para uso comercial, como ocurrió con el Fuerte Grant, que al contar con baterías en Naos, Culebra, Perico y Flamenco, se convirtió en un conjunto de islas unidas al continente por una calzada que servía como rompeolas, construida con el material extraído en la construcción del canal.

La mayoría de los edificios que se encuentran en esta área son utilizados como oficinas por el Servicio Aeronaval (SENAN). En el lugar también funciona el Club de yates de Colón.

No obstante manifiesta que la Batería Morgan, ubicada en la ciudad de Colón, no corrió con la misma suerte, ya que por casi ocho años (2004-2009) fue escenario de eventos culturales tanto para los pobladores como visitantes, iniciativa que no pudo continuar por falta de mantenimiento por parte de las autoridades competentes. El lugar ofrece una vista de la bahía de Colón. ‘Actualmente, de los tres fuertes éste es el único que cuenta con una norma de protección', añadió.

Para el arquitecto, el Instituto Nacional de Cultura (INAC) no tiene intenciones de realizar acciones de demolición en ninguna de las tres fortificaciones -Fuerte Sherman, Randolph y De Lesseps- si no que más bien se trabaja para integrarlas al desarrollo urbano. ‘Espero que estas intenciones se mantengan, porque no existe una legislación puntual sobre dichas fortificaciones militares'.

Fruto culminó su participación con el mensaje de que es posible reinvertar y adaptar las fortificaciones en diversas formas, ya sea para uso cultural, económico o turístico. Comentó que en la provincia de Colón se han estado ensayando en los últimos años dinámicas relacionadas con temas culturales.

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