El ataque se produjo mientras se desarrolla en la provincia canadiense de Alberta una cumbre del G7 en la que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski,...
- 29/03/2010 02:00
PANAMÁ. Las Iglesias Católicas a nivel nacional amanecieron abarrotadas ayer, Domingo de Ramos. La mayoría acude a buscar “la palmita” para colgarlas en cruz en sus puertas o para bendecir agua, velas y otros objetos religiosos. Otros, simplemente llegaron impulsados por la fe en estos tiempos difíciles para la Iglesia.
Existe mucho pecado personal y social, en nuestro país y el mundo entero, y mencionó que el único remedio es la conversión y el cambio de actitud, pronunció en su sermón monseñor José Dimas Cedeño en la Iglesia Catedral, donde como todos los años el inicio de la Semana Mayor atrae a miles de personas nacionales y extranjeros.
Lo mismo ocurrió en La Villa de Los Santos, uno de los pueblos donde se mantiene un gran fervor por estas tradiciones y en el que la entrega de la palma bendita, que simboliza la entrada de Jesús a Jerusalén, marca el comienzo de una semana llena de actividades religiosas sobre la vida, obra y pasión de Jesucristo.
La fe movilizó a cientos de fieles en la Iglesia San Nicolás de Bari, en Arraiján. Tras la bendición de las palmitas incluso se recorrió con una cruz las principales calles. Los cantos, las plegarias y el olor a incienso anunciaron así que es tiempo de reflexión y recogimiento.
El Sinaproc, la Policía y los bomberos montaron un monitoreo previo en Alanje, Chiriquí, donde se espera que unas 60 mil personas visiten el Santuario de Alanje y al milagroso Cristo para pedir favores y pagar “mandas”. Sólo entre el Jueves y Viernes Santo se aglutinan cerca de 45 mil devotos.