Boda en la playa termina en peleas

PANAMÁ. A pesar del insistente llamado de la Iglesia católica a mantener un clima electoral armónico y de tolerancia, la élite política ...

PANAMÁ. A pesar del insistente llamado de la Iglesia católica a mantener un clima electoral armónico y de tolerancia, la élite política sigue protagonizando escenas que mancillan el respeto a la dignidad humana, a la vida privada y en sí, al espíritu del pacto ético electoral.

Nuevamente, figuras políticas rindieron culto a la intolerancia. Los detalles del incidente explotaron en la red social Twitter desde la madrugada del domingo. Los actores del episodio: el mandatario Ricardo Martinelli, también presidente del partido Cambio Democrático, y Jaime Alemán, militante del partido Panameñista, quien fue embajador de Panamá en Estados Unidos durante el actual gobierno. El escenario: la celebración de una boda en el balneario de Buenaventura, en Coclé.

Pero no se trataba de cualquier boda. Eran las nupcias de una hija del panameñista Alberto Vallarino, millonario empresario y exministro de Economía y Finanzas.

La serenidad y alegría de la celebración de uno de los días más importantes en la vida de cualquier mujer se nubló por discusiones entre políticos y empresarios.

Los invitados a la fiesta de playa, vestidos de blanco, fueron testigos de un desagradable coctel de copas, reclamos, empujones y en el que supuestamente hubo hasta derechazos.

PLEITO 1

Fuentes que pidieron reserva contaron a La Estrella que el primer incidente fue entre el presidente Martinelli y el exembajador Alemán. La discusión habría iniciado con un cruce de palabras en el que reinaron los insultos y términos soeces.

Supuestamente, el mandatario le reclamó a Alemán sobre las acusaciones que en privado hacía en su contra.

Palabras sacaron palabras, y como en un tinglado de boxeo, vinieron empujones y puñetazos. De acuerdo con los consultados, en esta discusión el presidente Martinelli salió lesionado.

Para poner fin a la pelea tuvieron que intervenir los escoltas del mandatario y hasta el diputado Francisco ‘Pancho’ Alemán ayudó para que no pasara a mayores.

Otras fuentes aseguran que el ministro de la Autoridad de Turismo, Salomón Shamah, también intentó separar a los políticos.

PLEITO 2

Un segundo incidente se habría suscitado, según algunos invitados, entre los empresarios Rafael ‘Boli’ Bárcenas y ‘Tito’ Paredes, exbanquero del Metro Bank.

Bárcenas supuestamente le reclamó al banquero por un video. Paredes ripostó con un puñetazo y ambos tuvieron que ser separados.

Los consultados coinciden en que el empresario Alberto Vallarino estuvo molesto por los altercados que involucraron a cuatro de sus invitados y que rompieron la armónica celebración en la que estaban otros políticos.

REACCIONES

En Twitter, las opiniones se esparcieron como pólvora. Políticos del oficialismo y de oposición; juristas y ciudadanos cuestionaban y comentaban con jocosidad el suceso.

El abogado Ernesto Cedeño escribió: ‘en el evento de que haya sido verdad que hubo peleas entre políticos recomendaría tirar el pacto ético electoral al inodoro’.

Al caer la tarde, a través de la misma red social, el presidente Ricardo Martinelli negó el hecho. Dijo que desde secundaria no recuerda que nadie le haya pegado.

Tal parece que el llamado de la Iglesia católica a la paz ha caído en oídos sordos y el pacto ético es como letra muerta. Los dimes y diretes son la sazón de este proceso electoral donde el escenario es lo de menos.

Y como escribió un seguidor: si este incidente no se hubiera suscitado, la boda de la hija de Alberto Vallarino habría pasado desapercibida para la mayoría de los ciudadnos panameños que no estuvieron invitados.

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