‘Hubo corrupción’: fiscal Chevalier

PANAMÁ. Llegó ataviada con un vestido rojo veinte minutos antes de la hora pactada para dar inicio a la audiencia preliminar en el Juzgado Tercero Penal. María Cristina González, la exdirectora del Servicio Nacional de Migración, se mostró tranquila y dijo tener fe en Santa Librada.

El juez Adolfo Mejía llevó adelante el proceso. La fiscal segunda Anticorrupción, Lizzette Chevalier, comenzó pidiendo llamamiento a juicio para María Cristina González y otros cinco exfuncionarios de la entidad.

Chevalier señaló durante la audiencia que el Ministerio Público se dedicó a buscar la verdad. Esa verdad condujo a acusar a la exdirectora de Migración de delitos contra la administración pública y la fe pública. ‘Hubo corrupción y lo dice la Nación, el Estado y la ciudadanía’, advirtió la fiscal.

Junto a González —a petición de Chevalier— deberían ser llamados a juicio Edys Orlando Sáenz, quien fungía como director de Visas Autorizadas en Migración; y la abogada Yulissa Carrizo, quien se encargó de tramitar las visas para los ciudadanos hindúes que residían en Bangladesh.

Por falsificación, la fiscal pidió llamamiento a juicio para Hidelbrando Vallester, David Concepción y Walkiria Gallardo.

Mientras tanto, Chevalier solicitó sobreseimiento provisional para Juan Carlos Miranda, Janeth Rodríguez y Ángel Paz.

LA DEFENSA DE LOS IMPUTADOS

La abogada de María Cristina González, María Eduarda Córdoba, aseguró que el expediente es un ‘híbrido’, ya que recoge varios sucesos y a su vez a una multiplicidad de actores.

Además, durante la fase de los alegatos agregó que las pruebas presentadas no estaban claras, por lo que pidió sobreseimiento definitivo para su defendida.

‘Pienso que el tribunal ha quedado debidamente ilustrado’, añadió Córdoba.

Otros juristas que conformaban la defensa de los imputados pidieron nulidad del expediente. Entre ellos, el abogado Carlos Herrera Morán, defensor de la abogada Yulissa Carrizo.

El abogado Carlos Augusto Herrera —otro de los defensores de González— señaló que la fiscalía fue ‘pulverizada por la batería de abogados que han sabido tejer muy bien el expediente’, sustentando que contaba con nulidades, inconsistencias y acumulación de procesos.

Chevalier —por su lado— asegura que tiene los argumentos necesarios para probar que no procede la nulidad y adelanta que pueden haber varios delitos contenidos en el caso.

El juez definirá dentro de los próximos 15 días —acogiéndose al término que le da la ley— si los imputados son llamados a juicio o no.

María Cristina, en tanto, deberá dar cara a otros procesos por su gestión en Migración. Uno de ellos, el de Ocean Cross.