Analfabetismo emocional, el peligro de la sociedad actual

La Organización Mundial de la Salud reveló en su portal web que los problemas de salud mental serán la principal causa de discapacidad en el mundo en 2030. Con base en esto, explicó que 1 de cada 4 personas tendrá un trastorno mental a lo largo de su vida.

El 12,5% de todos los problemas de salud está representado por los trastornos mentales, una cifra que supera el cáncer y los problemas cardiovasculares. Un 1% de la población global desarrollará alguna forma de esquizofrenia a lo largo de su vida, mientras que 450 millones de personas en todo el mundo se ven afectadas por un problema de salud mental que perjudica gravemente su día a día.

El panorama que vive la sociedad actual es de extrema preocupación para los especialistas de la salud mental. “Actualmente existe un analfabetismo emocional en nuestra sociedad”, explicó el doctor Enrique Rojas, catedrático de psiquiatría y especialista en depresiones, estado de ansiedad y trastornos de la personalidad, en una conversación con el medio. “Esto quiere decir que las personas no tienen la capacidad de entender y manejar sus propias emociones”.

A lo largo de la vida las personas toman decisiones que traen consigo impactos positivos o negativos, ya sea por logros personales, laborales o románticos. Entender y gestionar estas emociones de manera que no incremente el estrés que generan, se ha denominado inteligencia emocional, y es uno de los tantos temas prioritarios en las agendas de los expertos en salud mental.

Según Rojas, la inteligencia emocional se define como “aquella capacidad para mezclar con arte y oficio los instrumentos de la razón y las herramientas del mundo sentimental”. Agregó que puede ser aprendida a cualquier edad, pero “lo ideal es que los padres aprovechen los primeros años de vida de sus hijos para enseñarla”.

Añadió que hay tres lenguajes en la inteligencia emocional: el lenguaje verbal, el no verbal y el epistolar. “El lenguaje verbal se basa en expresar con palabras aquello que sentimos, mientras el no verbal utiliza gestos, miradas y sonrisas, y el epistolar expresa sus sentimientos a través de cartas”, explicó Rojas.

“Esto podría evitar muchos problemas a futuro, como al momento de enamorarnos, ya que aprendemos a expresar lo que sentimos de manera correcta”, aseguró. En cuanto al uso de las redes sociales, consideradas un atraso en materia de expresar sentimientos, el profesional afirmó que “siempre y cuando sean bien utilizadas, la tecnología o nuevas maneras de comunicarnos tienen una gran eficacia emocional”.

El catedrático habló de aquella que considera “una de las decisiones más importantes en la vida humana: enamorarse. Es aquella que “no debe ser tomada a la ligera, porque puede elevar o destruir a un individuo y desencadenar una serie de graves problemas”, dijo.

“El amor es una tetralogía”, informó Rojas. “Existen cuatro ingredientes importantes para llegar a ello y permanecer ahí”. Listó que el amor es un sentimiento, un acto de voluntad, un acto de inteligencia y además necesita de un fondo espiritual. Sin embargo, “uno también debe mantenerse firme con lo que desea”.

“La gente se enamora del amor”, afirmó el psiquiatra oriundo de Granada, España. Aseguró que este es el primer error en una relación, porque “el individuo eleva a la persona en la que se fija, sin verle error alguno”.

“Hay tres elementos fundamentales por los que uno se enamora: la admiración, la atracción física y la atracción psicológica”, apuntó.

“Es muy importante evitar idealizar a una persona, ya que genera ideas erróneas de quien tenemos enfrente”.

Agregó que de los cuatro ingredientes que forman el amor, los dos más importantes son la inteligencia, ya que “logra captar la realidad en su complejidad y conexiones”, y la voluntad, porque “es la capacidad psicológica para decidir si un objetivo es medible, concreto, y si debemos o no, luchar por él”.

“Lastimosamente la primera epidemia mundial en el adulto es el divorcio”, informó Rojas. Para esto dio tres consejos: evitar discusiones innecesarias, no revolver el pasado, y saber que la felicidad conyugal consiste en tener buena salud y mala memoria.

“La capacidad para olvidar lo malo de la vida en pareja, es salud mental. De lo contrario, caemos en el rencor y el resentimiento”, expresó.

La Organización Mundial de la Salud informó en su portal web que más de 300 millones de personas a nivel global viven con algún tipo de depresión. El profesional de la salud mental define esta enfermedad como “un estado de ánimo presidido por sentimientos negativos, apatía, tristeza, ganas de llorar, invitación a recorrer el pasado personal de forma nociva, lo que provoca una paralización de la persona que se puede manifestar de forma anímica o mental”.

“Esta es la enfermedad de la melancolía y se puede caracterizar por factores internos como la bioquímica del cerebro y rasgos hereditarios (endógena) o factores externos que se producen por los acontecimientos de la vida (exógena)”.

Por lo general, la depresión afecta a hombres y mujeres por razones distintas. “En los hombres se puede dar por fracasos profesionales o económicos, mientras en las mujeres ocurre por fracasos familiares y sentimentales, aunque, con el cambio que la mujer ha tenido en la sociedad, puede presentar las mismas razones que el hombre”.

Rojas explicó a La Estrella de Panamá que la vida es definida por la compañía que cada individuo tiene. “Es importante llenarnos de 'personasvitamina', esas personas que nos llenan de manera positiva y nos alegran la vida”, expresó.

Agregó que el objetivo que muchos tienen en la vida es “encontrar la verdadera felicidad o la felicidad absoluta”, pero esta “no existe”.

Sus redes sociales detallan cinco consejos para ser feliz:

1. Ser capaz de cerrar las heridas del pasado.

2. Aprender a tener una visión positiva de la vida.

3. Tener un buen equilibrio entre corazón y cabeza.

4. Saber valorar las cosas que uno tiene y las que uno ha conseguido.

5. Tener capacidad de apreciar las pequeñas alegrías y placeres de la vida ordinaria.

“El verdadero objetivo debe consistir en encontrar la 'felicidad razonable', que significa sacar el máximo partido de la vida personal”, concluyó.