La tecnología como agente de cambio social

El desarrollo de las Tecnologías de la información y la comunicación no sirven unicamente para la diversión o los tiempos de ocio, sino que pueden ser herramientas de cambio social, así lo aseguran Álvaro Pérez de Cárdenas y José Carlos Rodríguez Menéndez, a cargo de Innovación y Desarrollo en Latinoamérica (Idel).

Según explica Pérez, el objetivo de Idel es disminuir la brecha tecnológica que existe en la actualidad, especialmente entre el área urbana y la rural.

‘Ahora en el mundo ya no se habla solo de una primera brecha digital, sino de una segunda brecha digital’, dice Pérez. Esta nueva brecha tiene que ver con que aún teniendo acceso a la tecnología, no se puede tener acceso a la más reciente, puesto que ésta avanza a pasos agigantados.

En este contexto, Idel diseña desde Panamá para el mundo software o programas educativos cuyo objetivo es disminuir la antes mencionada brecha.

AULA DIGITAL

Su trabajo más notable hasta ahora es una plataforma educativa que ya se ha probado en Perú, y que se llama Aula-Digital. Ha sido diseñada por un grupo de panameños y nacionales de otros países e instalada por un equipo de panameños en el país andino.

‘Esta es una plataforma para lograr una gestión educativa en escuelas públicas con contenidos libres de internet’, dice José.

En ese programa educativo se les enseña el uso de herramientas tecnológicas básicas y pedagógicas al servicio de la comunidad. Es decir, que lo importante es generar cambio a través de la tecnología, cambio que mejora la calidad de vida de los individuos que habitan la comunidad.

El objetivo es que sepan ‘qué valores y qué usos tiene el internet en su vida’, indica Álvaro.

No obstante, los valores y usos no se le sugieren a los miembros de la comunidad, sino que responden a un estudio en donde se busca conocer de parte de los miembros que la habitan cuáles son sus necesidades. ‘No somos tan pretensiosos de llegar a un lugar y decirles ‘Ustedes necesitan esto’. Nosotros primero hacemos un estudio’, dice Rodríguez.

Y a medida que el proyecto evoluciona, se toman medidas que correspondan a las nuevas difícultades que van surgiendo.

¿Cuáles han sido los resultados de esta labor? Antes de introducir el programa, en años pasados, el porcentaje de estudiantes que accedían a la universidad luego de terminar la escuela era de 25%. Y el promedio de deserción universitario de estos estudiantes era del 100%.

‘En un año el acceso a la universidad subió al 100% para estas comunidades. Sin embargo, no vamos a saber cuántos de estos estudiantes se graduan hasta dentro de cinco años. Pero es una muestra de cómo la tecnología hace que ellos estén más preparados’, dice Álvaro.

¿Qué más puede hacer la tecnología?