Mariafeli Domínguez y la literatura vivencial

Al tratar de dar detalles de porqué es tan importante la búsqueda de la cultura y la tradición, así como tener una conexión muy cercana a las raíces propias en su proceso creativo, Mariafeli Domínguez solo dijo: “Sin vivencias no hay literatura”.

La autora panameña logra ejemplificar muy bien esas temáticas, que también pone en práctica en su labor como escritora, en Parturiens y otros relatos y microrrelatos, su última publicación hasta la fecha.

Se trata de una compilación de 33 historias basadas en las experiencias y costumbres de sus hermanos, conocidos, estudiantes, y su entorno en general.

“Cuando la gente lee este libro, se siente identificada, porque relata cosas que nos ocurren en algún momento de la vida. Son cosas arraigadas a nuestras costumbres”, explicó Domínguez a La Estrella de Panamá.

Y es que, ¿quién no se ha sentado una tarde a escuchar historias de sus abuelos cuando era niño? ¿Quién no ha descubierto cosas nuevas de su historia familiar en algún momento? Justamente esa es la intención de la escritora con este libro, resaltar aquellas vivencias que nos forman como persona y nos acercan a nuestras raíces.

Parturiens y otros relatos y microrrelatos empezó empíricamente, en un taller de expresión oral para la materia de español en el interior del país dictado por la propia autora.

Con la idea de hacer que sus estudiantes se sintieran más identificados con su historia y su tierra, Mariafeli les pidió que contaran anécdotas, cuentos, relatos o vivencias que se les vinieran a la mente, sin saber que algunos de ellos formarían parte del libro.

Otros de los relatos y microrrelatos presentados en el libro forman parte de experiencias que la misma autora vivió o anécdotas que escuchó de parte de sus familiares.

Domínguez explica que su vida gira alrededor de estos recuerdos y vivencias, que hasta cierto punto también le han servido como fuente de inspiración para 'Parturiens' y otras de sus obras.

'Don Ramón', una de las historias favoritas de la autora contenida en la publicación, es inspirada en una anécdota que le contó el señor encargado de limpiar su finca en el interior, Ramón, quien fue a hacerle el favor de comprarle unos plátanos pero en el camino se encontró con su “compadre” Abundio, a quien tuvo que rescatar de una boa antes de regresar con lo que se le había encomendado.

'El viejo del río', como también lo apodaban en la finca, se volvió de alguna u otra manera una persona muy querida para ella.

“Para mí fue una persona muy especial, él murió hace muchísimo tiempo y esa es una historia muy querida, no sé si tiene un valor literario pero es una vivencia que yo tuve con él “, dice la escritora, estableciendo así su importancia.

“Dentro de este libro también se recogen mis vivencias como niña y como estudiante, que también están ligadas a eso que la gente vive. Por eso es que le di un título como este ['Parturiens'], que está basado en la violencia, porque eso es parte de la violencia que sufrimos que no siempre es física, a veces es una violencia de esas calladas que te minimizan como persona, te invisibilizan como mujer”, contó la escritora a La Estrella de Panamá.

Otra de las intenciones de la autora con Parturiens y otros relatos y microrrelatos es dar visión a las experiencias de otras mujeres, especialmente aquellas que viven en el campo o en zonas alejadas.

Es por eso que el libro lleva el nombre del primer relato, donde el lector se encuentra con la historia de una madre que en el ajetreo de las labores de la casa, está a punto de dar a luz. Rodeada de sus hijos –todos varones– desea que su próximo bebé sea una niña, para que cuando crezca pueda ayudarla.

“[En 'Parturiens'] la mujer está sola en este caminar de madre, porque por ningún lado se menciona al padre, ni siquiera se sabe si tienen uno. Hay mucha violencia tácita en el panameño, pues en estas regiones lo que veía era a estas mujeres teniendo hijos con la esperanza de que les sucediera algo bueno en el futuro, o tener una hija para que las ayude [a criar a los otros niños]”, fue lo que expresó la autora.

Mariafeli concluyó diciendo que para ella la literatura es una manera de expresión de las vivencias, sentimientos, y una denuncia solapada, sobre todo en el caso de las mujeres.