Inspirados en Frida Kahlo

MÉXICO. El país de origen de la pintora Frida Kahlo (1907-1954) se ha desbordado este mes en tributos, tanto en el arte como en lo comer...

MÉXICO. El país de origen de la pintora Frida Kahlo (1907-1954) se ha desbordado este mes en tributos, tanto en el arte como en lo comercial, hacia la artista.

La revista Vogue mexicana la colocó de portada en una edición especial que publicó este mes, aunado a la exposición ‘Las apariencias engañan: Los vestidos de Frida Kahlo’, compuesta por 22 vestidos de su ajuar, y cuya apertura está programada para el 24 de noviembre.

Ahora la marca de moda especializada en pintar sobre seda, Pineda Covalín, dijo haber tomado a la esposa de Diego Rivera como musa al preparar su colección primavera verano 2013, que mostró en Mercedes-Benz Fashion Week México.

PROPUESTA

La primavera verano 2013 de Pineda Covalín será moderna, aunque no por ello se aparta de sus raíces. En su nueva colección la firma evocó el espíritu mexicano con una versión moderna de Frida Kahlo. Un puñado de modelos en trajes de baño lucieron los emblemáticos pañuelos de Pineda Covalín como tocados elaborados y simples.

La Frida de Pineda Covalín alcanzó el punto álgido con dos vestidos veraniegos de caída larga sujetados con tirantes en forma de moño que con su volumen emulaban las amplías faldas que usaba Kahlo.

La firma, reconocida por su maestría en los estampados en seda y la confección de pañuelos con motivos mexicanos, invitó a Daniel Andrade para colaborar en su nueva colección.

El creador le inyectó la modernidad de sus clientes jóvenes y atrevidas, que incluyen a la cantante Alejandra Guzmán.

La sinergia entre Andrade y la firma, concebida por Cristina Pineda y Ricardo Covalín, dio forma a vestidos ligeros confeccionados en seda con estampados prehispánicos y gasas de seda que fueron modernizados, como pañuelos de la marca que se convirtieron en una especie de chaqueta rockera sobre los hombros de las modelos.

Andrade evitó la monotonía al incluir atuendos relajados que funcionan con las mujeres contemporáneas, quienes pueden combinar, por ejemplo, un pantalón estampado en tonos grises con una blusa de gasa y drapeados al frente para la oficina y transformarlos en un atuendo de noche.

La línea incluyó siluetas más juveniles como faldas-pantalón, jumpers y pantalones pata de elefante en tonos uva, beige, rosas y turquesa.

En cuanto a las piezas para caballeros, la propuesta incluyó guayaberas a juego con pantalones de seda con estampados psicodélicos, que resultaban adecuados para la playa.

Para su cierre, Andrade, Pineda y Covalín, jugaron con texturas y el color en un dramático vestido de hombro asimétrico que semejaba un caleidoscopio.

La modelo tenía un moño enorme, del tipo que sólo una mujer como Kahlo luciría con aplomo. Aunque todo el concepto se basaba en la artista, ¿se sentiría Frifa Kahlo representada en esa colección?

Lo Nuevo