Gina, Jessica y la autorrealización femenina

PANAMÁ. La suite destinada a las entrevistas estaba vacía cuando nos acercamos. Nuestro enlace nos pidió que esperáramos un poco, Gina Torres estaría por llegar. Frente a nosotros, una silla vacía y a un costado, un enorme afiche con la imagen de Jessica Pearson, papel que interpreta en la serie Suits que iniciará transmisiones el próximo 4 de julio en el canal Space, nos mantenía al grupo de periodistas a la espera con cierta solemnidad.

La puerta se abrió y era ella. Muy alta, esbelta, más de lo que luce en televisión. Pero a diferencia de Jessica Pearson, Gina Torres luce muy accesible. Su sonrisa amplia y franca te hace sentir en confianza, aunque nunca antes la hayas visto.

‘¿Puedes responder en español?’, preguntamos. ‘Sí, claro’ respondió sin el mayor reparo. Son pocas las oportunidades en que la actriz estadounidense de padres cubanos puede hablar nuestro idioma. Le cuesta un poco, pero se esfuerza y hace que sus palabras fluyan.

‘Si te pudiera dar una respuesta definitiva, el problema se hubiese resuelto, acabado, pero no. De verdad, no sé’, responde a la pregunta de si un personaje como Jessica Pearson ayudará a la mujer a abrirse camino en el mundo profesional.

‘Si miramos el mundo a través de los ojos de una minoría como las mujeres, los latinos o los afroamericanos, veremos el mundo como una cajita. Yo veo un mundo en el que hay muchísima gente; estamos haciendo historias humanas y los humanos vienen en diferentes colores, en diferentes sexos. En el mundo en el que yo existo hay muchas variedades de gente, en muchísimas posiciones’.

Torres no considera que su papel esté pensado para representar un grupo específico de personas, pero entiende que su personaje es muy positivo y puede ayudar a marcar una tendencia.

‘Ella es una mujer fuerte, una mujer inteligente, poderosa. No es un accidente que ella esté en la posición en que está’, dice sobre Pearson, cabeza de uno de los bufetes de abogados más prestigiosos de Nueva York en el que se desenvuelve la serie Suits.

Sin embargo, poco se conoce sobre ella. ‘Cuando la serie se desarrolle un poquito más, quiero ver las otras cualidades que ella tiene. Uno ve un poquito de su humor, pero también quisiera ver algo de su suavidad, porque es una mujer y, para mí, lo femenino es bonito. Cuando una mujer está en esa posición, no tiene por qué perder la suavidad’, dice. Otro detalle es que Jessica Pearson, al menos en la primera temporada de Suits, solo refleja su faceta profesional. Gina espera conocer y dar a conocer más facetas de su álter ego.

Nos causa curiosidad saber si Jessica es respetada en su posición. ‘Yo creo que sí’, comenta, ‘si los demás piensan algo, no se atreverán a decirlo en voz alta, nadie se atreve a meterse con esa mujer’, dice mirando con respeto al banner.

Pero ¿se parece Gina a Jessica? Gina piensa su respuesta y dice: ‘Un poquito. Ella me inspira’, y vuelve a mirar la imagen del banner. Luego añade ‘me gusta tener mis cosas organizadas, me gusta cuidar lo mío, mi gente, mi hogar, eso es importante para mí y es importante para ella, pero definitivamente no soy tan dura como ella’.

La oportunidad de interpretar a Jessica Pearson le cayó en buen momento.

‘No estaba trabajando en ese momento y siempre es bueno tener la oportunidad para hacer un personaje como ella porque es fuerte, femenina, bonita, tiene carácter y es una mujer 100% realizada. Me encanta tener la oportunidad de dar ese ejemplo’, afirma.

Una colega le pregunta, ‘¿crees que hay mujeres 100% realizadas?’, a lo que responde, ‘bueno, si no lo son, espero que estén trabajando en eso’.

Para la actriz, la realización en la mujer no tiene que ver tanto con una posición lograda como con el hecho de ‘conocerse más a fondo, hasta el alma y sentirse bien consigo misma’.

Y es que según Gina ‘las mujeres siempre tienen la presión de ser mujer. Somos muy duras con nosotras mismas en cuanto a cómo nos vestimos, cómo lucimos, cómo está nuestro cabello, si tenemos celulitis; y dejamos de lado aquello que hemos logrado o vamos a lograr en nuestra vida’.

‘Espero que esa importancia cambie, pues cuando una mujer se siente confortable consigo misma, eso es lo más bonito que hay y eso es estar realizada. Es lo que me encanta de esa mujer que está allí —y vuelve a señalar el banner—, que ella misma se conoce y eso es bonito’.

No todo puede ser perfecto y Jessica Pearson no lo es.

‘No me gusta de ella su dureza, pero sé que eso cambiará’, dice con la convicción de quien tiene el poder de hacerlo. ‘En fin, ella no es tan dura y es admirada porque dice y hace cosas que muchas de nosotras no podemos’, concluye.