Experimente con los sentidos

FANTASEA. Empieza por el órgano sexual más poderoso, el cerebro. El sexólogo Michel Lemay explica: “En realidad, lo esencial no es técnicamente hacer el amor más despacio, sino el tomarnos el tiempo necesario para reflexionar sobre nuestro deseo. Una relación de una noche puede ser bella, íntima e intensa, desde el momento en que los implicados la hayan deseado realmente y si existe una verdadera interacción y complicidad entre ellos”.

Huele.. Un estudio de la universidad de Rice (Houston, Texas) asegura que las mujeres ‘olemos’ si nuestra pareja está excitada. Y es que el olfato es lo primero que excita al sexo femenino. A la excitación a través de los aromas fuertes se la denomina ozolagnia. Desde los antiguos manuales árabes del amor, que elogiaban las virtudes de aromas como el de la pimienta negra, o los estudios griegos, que alababan los efectos amatorios del romero, hay opciones para todos los gustos.

Escucha.. ¿Hay algo más sexy que un susurro? ¿No puede una música sugerente contribuir a subrayar el gozo sexual? Que se lo digan a Serge Gainsbourg y Jane Birkin, que con Je t’aime revolucionaron a todos los censores.. El otro sexo oral –el sexo al oído– es una herramienta poderosísima de seducción. “El lenguaje es una piel –dice Roland Barthes–. Yo froto mi lenguaje contra el otro”. Aventúrate a experimentar con el embrujo de tus palabras y tus gemidos, jadeos, suspiros.. y seguro que te sorprende el resultado.

Saborea.. No olvides conceder su protagonismo al paladar. Decían que, para consumar sus conquistas, Casanova se hartaba de ostras. Independientemente de la infalibilidad de los alimentos afrodisiacos, el sentido del gusto es muy importante en las relaciones sexuales. Y sabores como el chocolate, la miel o la canela son eficaces despertadores de la lujuria.

Y toca.. acaricia, palpa, amasa, araña, oprime, abraza, besa.. Deja que tu piel explore y se dilate. Y disfruta. Ancora, ancora, ancora, ancora. Todavía...todavía) Á©ELPAIS.SL.