Eladio se descubre

E ntramos por una puerta de vidrio a la Policlínica Presidente Remón de la Caja del Seguro Social, en Calle 17. Unos escalones nos conducen a un estrecho vestíbulo dominado por el escritorio de un guardia de seguridad, el cual nos impide avanzar hacia los ascensores. Unos segundos después, la figura de un hombre espigado, moreno y con caras de pocos amigos emerge de uno de los elevadores. Se trata de Eladio Fernández, líder de la Asociación Nacional de Jubilados Independientes, quien a pesar de su tono autoritario no logra convence al celador de que nos deje pasar. Un tanto frustrados, le proponemos al ex miembro de la Policía Nacional que busquemos otro lugar para concretar la entrevista. No obstante, Eladio tiene otros planes. Con una astucia que confirma aquello de ‘que más sabe el diablo por viejo...’, nos conduce a la entrada principal del vetusto inmueble. ‘Eladio, yo no soy jubilada pero votaría por ti para presidente’ le espeta mientras camina por la acera un mujer de jeans apretados: una pequeña muestra de la popularidad del dirigente que hoy va vestido con una guayabera amarillo limón y una boina gris. +3D