Ecoturismo: una guía dentro y fuera de la ciudad de Panamá

Gracias a su ubicación geográfica, Panamá se ha convertido en el hub de las Américas, por lo que el visitante no puede dejar de conocer y experimentar todo lo que el país tiene para ofrecer.

El istmo goza de tres tipos de patrimonio: cultural, verde y azul, así declarados por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

Uno de esos espacios es el Casco Antiguo, también conocido como Casco Viejo, o el “barrio antiguo”, es el distrito histórico de la ciudad de Panamá.

Considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, se remonta al año de 1673 y cuenta con plazas vibrantes y pintorescas calles empedradas rodeadas de coloridos edificios.

La zona es ideal para caminar, descubrir la historia y disfrutar de una vida nocturna en los mejores bares, en las azoteas y restaurantes, los cuales ofrecen una escena gastronómica vibrante y diversa, dirigida por chefs de clase mundial.

Actualmente en el país, debido la pandemia, se han tomado algunas medidas de bioseguridad por parte del Ministerio de Salud (Minsa) y los establecimientos deben cerrar sus puertas a las 9:00 de la noche.

Según describe la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP), para experimentar todo lo que la ciudad de Panamá tiene para ofrecer al viajero debe considerar quedarse al menos unos tres días, y si desea explorar más, puede hacerlo según su presupuesto.

Pero si desea echar un vistazo a las tres ciudades a la vez –la antigua, la reconstruida y la moderna– puede hacerlo desde el punto más alto de la ciudad, como es el cerro Ancón con 199 metros de altura.

Este lugar escénico está abierto de 9:00 a.m. a 4:30 p.m., y es una visita obligada para todos.

También querrá conocer el Parque Natural Metropolitano, un área de bosque natural de 265 hectáreas dentro de la ciudad, lo que la convierte en la única capital del mundo con una selva tropical dentro de los límites de la ciudad y la cuenca del Canal del Panamá.

Considerado como una de las siete maravillas del mundo moderno, el Canal de Panamá es una visita de gran relevancia para cualquiera que viaje al país. Construido para reducir drásticamente el tiempo de viaje de los barcos entre el océano Pacífico y el mar Caribe.

Si gusta conocer un poco más sobre la historia de esta magnífica obra de ingeniería, puede darse una pasadita por el centro de visitantes ubicado en las esclusas de Miraflores, el cual cuenta con restaurante, sala de reuniones, cafetería, tienda de recuerdos del canal, una terraza para tener una vista panorámica de los barcos que por ahí pasan y las instalaciones del Imax Canal de Panamá, en el cual las audiencias de todo el mundo podrán impartir un viaje alucinante, a través de la magia de las cámaras 3D por el largometraje Panamá Canal: A Land Divided, a World United (Canal de Panamá: Una tierra dividida, un mundo unido).

Esta excelente película, narrada por el reconocido actor Morgan Freeman, revela información con imágenes nunca antes vistas de Panamá y del Canal, incluyendo la exploración indígena junto con los españoles, el Ferrocarril de Panamá, vistas aéreas del país y la selva tropical.

Otro centro de visitantes queda en Agua Clara, en el lado Atlántico del Canal, es decir en la provincia de Colón. Aquí está el otro juego de las nuevas esclusas y los visitantes pueden apreciar el cruce de los barcos y la exuberante vegetación. Además, podrá navegar en canoa por el lago Gatún.

Pero si lo que busca es bosque y conocer más sobre la cultura indígena, puede navegar por el río Chagres y visitar la comunidad indígena Emberá en la cuenca del Canal de Panamá. Para visitar el Canal, el centro de visitantes de Miraflores está a solo 15 minutos en automóvil del centro de la ciudad de Panamá. Las esclusas de Agua Clara están a una hora en auto desde la capital, cerca de la ciudad de Colón en el Atlántico.

El volcán Barú está ubicado en el altiplano de Chiriquí, rodeado por los pueblos de Boquete, Volcán y Cerro Punta. La entrada al parque está en Boquete, desde donde comienzan las caminatas y la mayoría de los tours. El Barú cuenta con 3,474 metros de altura; este volcán es el duodécimo pico más alto de Centroamérica y el único lugar del mundo donde, en los días más claros, se pueden ver los océanos Atlántico y Pacífico al mismo tiempo. El volcán y la tierra que lo rodea cuentan con cinco ecosistemas diferentes gracias a una combinación de tierras altas de bosque lluvioso, así como a los subproductos de erupciones volcánicas que ocurrieron hace millones de años.

Boquete, en la provincia de Chiriquí, es un productor de café geisha reconocido internacionalmente, gracias al suelo volcánico de la zona. Este café de alta calidad se cultiva a alturas extremadamente altas y es una de las variedades de café más caras del mundo. El volcán Barú tiene siete cráteres y varias rutas de senderismo que puedes tomar para verlos.

Otra opción es viajar 160 kilómetros hasta El Caño, en el provincia de Coclé, para descubrir uno de los sitios arqueológicos más importantes de Panamá. Para el año 2000, la arqueóloga Julia Mayo inició una nueva investigación formal en el sitio y encontró varios cementerios extensos que descubren la existencia de una civilización precolombina que pudo haber vivido en el área entre 700-1000 d.C. Este descubrimiento épico ha sido ampliamente informado por National Geographic y sigue siendo parte de la investigación arqueológica en curso que puede observar por sí mismo.

En cuanto a las playas, hay que mencionar que Panamá tiene numerosas islas y cayos, la mayoría de los cuales están deshabitados. Eso significa que encontrará muchas oportunidades para practicar el surf, la pesca, avistamiento de ballenas, llegada de tortugas a desovar y el buceo.

La costa del Pacífico de Panamá ofrece playas de arena negra y arena blanca perla como Pedasí, isla Iguana, el archipiélago de las Perlas, Coiba, Santa Catalina, y muchas otras.

Mientras que en el lado caribeño del país encontrará algunas de las islas más hermosas de Panamá, como las islas de San Blas y el archipiélago de Bocas del Toro, igualmente las playas de costa arriba y costa abajo de Colón. Cuando llegue allí, disfrute de aguas cristalinas, playas de arena blanca, hermosas palmeras y, al más puro estilo caribeño, un ambiente notablemente relajado.

De acuerdo con la ATP, las agencias de viajes y tour-operadores son fundamentales para el desarrollo turístico del país, ya que impactan económicamente a diferentes sectores comerciales y generan empleos para las comunidades de cada destino porque trabajan en conjunto con esta industria.

Los tour-operadores realizan la contratación y logística de transporte, hotelería, tours y experiencias, y cada actividad se complementa para lograr un producto turístico de calidad para el turista. Algunas de las actividades pueden ser propias del tour-operador o bien ser subcontratadas a través de un proveedor de dicha actividad. La actividad de agencias de viajes (tipo A y tipo B) está regulada bajo la Ley 73 del 22 de diciembre de 1976, reglamentada por el Decreto No. 17-A de junio de 1977.

Según la ATP, las agencias de viajes y tour-operadores pueden aplicar a los incentivos a la inversión turística, ofrecidos en el artículo 10 de la Ley 80 del 8 de noviembre de 2012.

“Las empresas que demuestren dentro de su oferta la organización y ejecución del turismo de aventura o ecoturismo estarán exoneradas del impuesto de importación e impuesto selectivo al consumo de ciertos bienes y servicios para la adquisición de vehículos automotores de doble tracción con capacidad mínima de cinco pasajeros, que sean, a criterio de la ATP, indispensables para el desarrollo de la actividad de la empresa y sean utilizados de manera exclusiva para la operación turística”, detalla la nota de la institución gubernamental.

Otra de las ventajas no solo para la industria de los operadores de turismo que se registren, sino para todas las que están debidamente certificadas, es que pueden ser promocionadas por la ATP a través de su sitio web, las cuales están disponibles en el listado oficial del Registro Nacional de Turismo.