Reciclaje electrónico, una acción verde que protege

La tecnología evoluciona rápidamente y con ella aumenta la creación de productos electrónicos. Este fenómeno de consumo en la era digital ha llegado para quedarse.

Al momento de adquirir estos artefactos, se cuestiona el impacto negativo que tienen en el medio ambiente si no se desechan de manera adecuada.

De acuerdo con un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el mundo se generan más de 50 millones de toneladas de residuos electrónicos por año: es decir, el equivalente a $62,500 millones.

Expertos aseguran que el reciclaje permite obtener aluminio, cobre o hierro, y el 98% restante de los aparatos desechados tiene una segunda vida. Y con ello, gracias a las materias primas obtenidas en el proceso de reciclaje selectivo, permite que se vuelvan a utilizar, en lugar de demandar más de sus fuentes originales: aluminio, cobre, hierro, níquel y platino, que forman parte de las tarjetas de ordenador y telefonía.

“Hay un consumo excesivo en la adquisición de los aparatos electrónicos en Panamá. Muchos de estos van a parar a nuestras playas y ríos generando una alta contaminación. Cuando estos artefactos están en los vertederos y son expuestos al ambiente, pueden liberar gases tóxicos que resultan perjudiciales para nuestro entorno y nuestra salud”, manifiesta Alida Spadafora, consultora y especialista ambiental.

Los 25 corregimientos del distrito de Panamá generan al mes 34,983 toneladas de basura, según cifras de la Autoridad de Aseo Urbano y Domiciliario (AAUD).

“Lastimosamente en el istmo la práctica del reciclaje electrónico, es escasa. El Plan de control de residuos especifica acciones con respecto al tema, incluso la Ley 33 del 30 de mayo de 2018, conocida como 'basura cero', habla de esto”, explica.

La ambientalista considera que hace falta un cambio de mentalidad para que se generen resultados favorables en el territorio nacional. “Debemos de seguir los ejemplos de países vecinos como Costa Rica y Colombia, que tienen planes funcionales de reciclaje. Se pueden hacer muchas campañas, pero la sociedad panameña tiene que despertar y mostrar interés por este tema. Hay personas que todos los años cambian de teléfono. Se debe evaluar si se daña nuestro celular repararlo, en lugar de reemplazarlo”.

Según un informe reciente de la Real Sociedad Británica de Química (British Royal Society of Chemistry, en inglés), un teléfono inteligente medio contiene 30 elementos químicos diferentes. Entre ellos se encuentran el tántalo, el itrio, el galio, el indio, que podrían agotarse en 100 años.

El informe establece que la extracción de estos depósitos es costosa, consume mucha energía y deja residuos tóxicos a su paso. Además, al entrar en contacto con el agua potable, pueden generar problemas de salud en los seres humanos.

La Unión Europea introducirá un “derecho a reparar” a partir de 2021, a través del que decreta que las refrigeradores y lavadoras deben ser reparables hasta 10 años después de su compra. Además, las piezas de repuesto de estos electrodomésticos deberán ser fáciles de obtener.

También hay alternativas para las principales marcas de teléfonos inteligentes: Fairphone intenta utilizar materiales más sostenibles y desarrollar productos con una vida útil más larga, y que sean más fáciles de reparar.

Existen otras propuestas como es el caso de Alemania, el Partido Verde propuso una idea para reducir los residuos electrónicos en el país: a las personas que decidan reciclar sus teléfonos, se les otorgará 25 euros.

“Somos la Fundación de Acción Social por Panamá. Empezamos hace 25 años con el programa 'Reciclando con la gente y el ambiente'. Estamos ubicados en Ciudad del Saber, donde llevamos 11 años. En nuestro centro de acopio recibimos materiales reciclables de áreas cercanas y aledañas. En promedio tenemos 100 visitas diarias entre empresas, individuos e instituciones que traen sus aparatos eléctrónicos”, destaca Rubén Rodríguez, coordinador de operaciones de FAS Panamá.

Con respecto a su operatividad, Rodríguez detalla que una vez que acogen los residuos y cumplen con la cuota de llenar el contenedor, ellos se encargan de llamar a una empresa que se ocupa de darle el tratamiento adecuado. “En este proceso se separan algunos materiales según su tipo, ya sea metal, aluminio, cobre, bronce, también se apartan algunas tarjetas de los aparatos, luego se compactan y se exportan a otros países”.

“Nuestro horario es de lunes a viernes, de 7:00 a.m. a 3:00 p.m. Nuestro personal se encarga de ayudarle a bajar la chatarra del auto y le indicamos dónde colocarla. No se le pide que la clasifique. Aquí la pesamos y posteriormente la llevamos al sitio de almacenamiento”, expone.

Si se desea reciclar, a continuación los centros donde pueden llevar los aparatos y así reducir su huella de basura electrónica.

Recicla Panamá reciben baterías, cables, calculadoras, celulares, centrales telefónicas, contador de dinero, copiadoras, electrónicos de negocios y oficinas, equipos de red, impresoras, laptops, máquinas de fax, entre otros. Su local queda ubicado en Juan Díaz, Los Pueblos, calle A, Desarrollo Los Alcázares. galeras #1 y #2. Para mayor información: +(507) 391-2376, +(507) 391-2377, +(507) 6780-3701/6998-4202.

Bliss's Earth Recycling Panamá cuenta con recepción de papel, baterías de carro, botellas de vidrio, cartón, tetra pack, chatarra electrónica, latas de aluminio, toners y tintas. Se sitúa en Llano Bonito, complejo Multi Storage local 84. Para más información llamar a los teléfonos: 385-8100/385-8101 / +(507) 61128583

Renuevo Panamá se encarga de reciclar equipos electrónicos: computadoras y sus partes, monitores, celulares, ipads, tablets, ipods, servidores. Está ubicado en Torre de las Américas, Torre B, piso 15, oficina 1504, Punta Pacifica. Para contactar llamar al 65031964 o escribir a través de email: info@renuevopanama.com