Enseñanzas del XXXIX Guantes de Oro

R eitero una vez más, quién sabe por qué número de veces, que el Gobierno puede construir todos los coliseos deportivos que quiera, al igual que ser protagonista de todos los ‘shows deportivos’ para complacer el ‘paladar’ del ciudadano presidente, pero al escribir la línea final, los resultados seguirán siendo los mismos, malos y de conformismo con los últimos lugares, y dar un tratamiento exagerado a una medalla de bronce, como fue la de Eileen Grench en esgrima en los XVI JP, como si fuese la de oro. Inclusive hubo ‘celebración’ en Palacio.

Esto obedece a que el problema de que nuestro deporte, a excepción de un puñado de atletas, que no superan el nivel centroamericano, más que de dinero, es por la falta de una buena organización y la insistencia de anteponer la política ,mediocridad, amiguismo, vínculo familiar, etc., en el nombramiento de la persona que dirige Pandeportes, dirigentes ‘mediocres’ en muchas federaciones, y tener a un DT de Deportes —en mi opinión— sin la idoneidad ni los conocimientos para realizar una labor efectiva en ese cargo.

El recién terminado 39° torneo de boxeo olímpico ‘Guantes de Oro’ fue el ejemplo clásico de improvisación y un cúmulo de contradicciones, producto de la sumisión del presidente de la Fedeboxeo, Jesús Rosales; y el secretario general, Marco Rosas, que cedieron su ‘autonomía’ a la Presidencia y al DG de Pandeportes, Rubén Cárdenas P., teniendo en su filas a expertos en la materia.

Primero anunciaron 117 boxeadores y combates en 10 categorías —tanto masculinas como femeninas—. Luego bajaron a 78, y finalmente fueron menos de 60 atletas.

Lo insólito que no debía ocurrir en un torneo con el objetivo de escoger a una preselección para un torneo clasificatorio para los JO de Londres 2012, fue la inclusión de boxeadores de ambos sexos como invitados, para dar una pincelada decorativa adicional al show patrocinado en Palacio.

En las tres finales de la rama femenina, dos boxeadoras participaron en calidad de invitadas. ¿Y por qué? Es sencillo, se trataba de un acto improvisado. Keira Graell (Ver), derrotó a la invitada, Yeni Rodríguez, y lo imperdonable, Lourdes Borbúa, de Veraguas, venció a la invitada Zuribety Gómez por RSC. En la división masculina, en 69 kilos, Jhon Rentería (Pan), venció al invitado Juan Urrutia, y en los 75 kilos ocurrió lo mismo, pues Luis Hernández (Pan), derrotó al invitado Robinson Aragón. En lo que evidentemente fue un combate disparejo, fue la Victoria de Melanio Flores sobre José Palacios (Coclé) a los 40 segundos del primer asalto por abandono. Flores tenía a su favor el haber participado en los IX JCA 2010, y los JCA y del Caribe, Mayagüez 2011.

Tres de los ganadores, Omir Rodríguez, de Colón, en los 64 kilos; Melanio Flores, de Veraguas, en 81 kilos; y Carlos Moreno, de Panamá, en 91 kilos, tienen experiencia a nivel internacional, por lo que en mi opinión, desde ahora y basado en que sus triunfos fueron contra boxeadores de un bajo nivel, se debe iniciar una planificación conjunta entre Pandeportes y la Fedeboxeo, con un buen apoyo, acompañado de una preparación rigurosa que incluye fogueos, para que lleguen al torneo en mayo de 2012, en Brasil, clasificatorio para los JO de Londres 2012, con una preparación para no ser eliminados en ¼ de finales. Desde luego no estoy diciendo que se excluya a Martín Pérez, de 49 kilos; Francisco Rivera, de 52 kilos; Luis Huertas, de 60 kilos; Jhon Rentería, de 69 kilos; y Luis Henríquez, de 75 kilos, pero la triste verdad es que no tienen experiencia internacional y les será más difícil ganar.

Es importante que se entienda que en el torneo clasificatorio para América participan los 41 CONs afiliados a la AIBA. Entre ellos están potencias del boxeo olímpico como Cuba, Brasil, Ecuador, Colombia, México, lo que indica que nuestros boxeadores que no han podido ganar medallas a nivel de JP, tienen pocas opciones de clasificar para los JO de Londres 2012. Tomen nota.

COCTEL DEPORTIVO