Las miradas sobre Melbourne

MELBOURNE. Llegar al primer gran torneo del año en la mejor forma es el ideal de cualquier tenista que compite en el circuito abierto.

Pero para el abierto de Australia, que comenzará el próximo lunes, son más las preocupaciones por malos resultados y lesiones.

Al menos, la estadounidense Venus Williams ya anunció que no competirá en Melbourne este año, debido a que aún no se encuentra recuperada.

Williams se retiró del Abierto de Estados Unidos en septiembre del año pasado antes de un encuentro de segunda ronda y está siendo tratada por el síndrome de Sjgren, una enfermedad autoinmune que causa fatiga y dolor de articulaciones.

Ese no es un golpe duro al torneo, si se compara con la caída de la local Samantha Stosur en Sydney ante la italiana Francesca Schiavone, quien luego perdería ante Daniela Hantuchova en el mismo torneo.

OTROS LESIONADOS

A estos malos resultados, hay que añadirles el retiro del suizo Roger Federer, quien dejó su partido de semifinales ante el francés Jo-Wilfried Tsonga por una contractura en la espalda. Aunque luego en su cuenta de twitter comentaría que estará listo para la cita en Australia.

Otra que desertó, pero esta vez en el torneo de Brisbane fue la belga Kim Clijsters, a la que una dolencia en la cadera obligó a retirarse de su partido ante Hantuchova a principios de enero.

‘No quiero que empeoren las cosas, quiero estar lista para jugar en Australia, así que retirarme fue lo mejor que pude hacer’, explicó Clijsters.

LOS QUE ANDAN BIEN

Por el momento, aparte del número uno del mundo, Novak Djokovic, es el escocés Andy Murray quien luce en mejor forma al acercarse el abierto australiano.

Murray desbancó al ucraniano Alexandr Dolgopolov en la final del torneo de Brisbane.

La victoria tiene un significado mayor, si se toma en cuenta que en su esquina está Iván Lendl, el astro checo que ganó ocho títulos de Grand Slam, y que ahora atiende técnicamente al jugador inglés.

También lucen buena forma los franceses Gael Monfils, reciente vencedor de Rafael Nadal y Jo-Wilfried Tsonga; finalistas en Qatar, torneo que ganó Tsonga.

Basta además una mirada al cuadro de preclasificados (ver tablas) para darse cuenta que los encuentros desde los octavos de final serán igual de trabados, tanto para damas como para caballeros.

La respuesta a una ecuación victoriosa puede estar en manos de agentes extra canchas, en esta ocasión.