¿Qué se hace para ayudar a Saladino?

P uedo señalar con mucha autoridad, que si usted distinguido lector visite la Hemeroteca de la Biblioteca Nacional, Ernesto J. Castillero, que es donde se guardan los diarios y otras publicaciones periódicas por día y fecha, y solicite ver ‘La Estrella de Panamá’ ( ahora La Estrella), a partir del año 2002, verás que el ‘Coctel Deportivo’ hacia referencia al atleta, entonces juvenil, Irving Saladino, censurando el mal trato del presidente de la Fepat, Dr. Ricardo Sasso, que le dijo que tenía que costear su pasaje y hospedaje si quería asistir al ‘CM’ de Atletismo Juvenil en Jamaica en el 2002. Participó porque la dirigencia de Colón, logró que la Refinería de Colón costeara el viaje.

Aún recuerdo ese momento, cuando Saladino junto con su entrenador Florencio Aguilar, con los ojos llorosos, visitaron las oficinas del COP, pidiendo que el presidente Melitón Sánchez, le diera una última oportunidad para intentar hacer la marca mínima para asistir a los JO de Atenas 2004, en un certamen en Bogotá, Colombia. El COP costeó el viaje a ambos, y Saladino hizo un salto de 8.12 metros, haciendo la Marca B, para los JO de Atenas 2004. Este servidor estuvo presente en Atenas, y testigo de que Saladino fue víctima del nerviosismo por ser la primera vez que competía frente a más de 70 mil espectadores, y apenas saltó 7.42 metros. No obstante, el técnico Joe Douglas de USA, que entrenó a Carl Lewis, y el brasileño Nélio Moura, observaron que tenía un talento natural, y ambos querían hacerse cargo de él. Considero que aún con 30 años haciendo las cosas bien, puede reivindicarse.

Con la ayuda de la IAAF, Saladino logró una beca para prepararse en su Centro de Alto Rendimiento en Sao Paulo, Brasil, y allí comenzó su recorrido hacía el pedestal de consagración mundial. A partir de su conquista de la medalla de plata en el ‘CM’ Mundial de Atletismo Bajo Techo en el 2006, fue que la prensa comenzó a resaltar sus actuaciones. Lo que muchos no entienden es que el buen periodismo deportivo, y esto lo aprendí gracias a los cursos intensivos recibidos en Seminarios dictados por la Fundación Reuters, tiene que ser justo y bien balanceado, destacando las virtudes de los atletas, y al mismo tiempo, señalando sus fallas. Es triste que en Panamá muchos no entienden o acepten esto, y creen que el periodista deportivo tan solo tiene que resaltar los logros de los atletas, aunque pertenecen al pasado. Señalar sus fallas del presente, lo convierte en un ‘ogro’, y un enemigo del o de los atletas. Es por ello que muchos colegas prefieren mejor ‘abrazar’ el silencio. No así este servidor de ustedes.

Esto ha contribuido a la actitud de no me importa de muchos atletas. Es urgente mirar de cerca las actuaciones impredecibles de Saladino desde el año 2009, en comparación con las de los años 2006 al 2008. Además de la falta de un fogueo de nivel para su participación del sábado 18 de mayo en la 2ª fecha de la Liga Diamante en Shanghai, según mis pesquisas, viajó sin su entrenador Florencio Aguilar, y fue acompañado por un kinesiólogo, (Chacón). Por el problema de exceso de faltas de que padece Saladino, necesita del entrenador, para indicarle los ajustes que debe hacer entre saltos para no cometer faltas. Así ocurríó bajo la tutela del técnico brasileño Nélio Moura.

Soy de la opinión aunque no soy ni médico o técnico en atletismo, que el problema de Saladino no es tanto en el aspecto de sus condiciones físicas, sino de orden ‘psicológico’, porque en sus actuaciones se nota la ausencia casi total de los 3 ingredientes fundamentales para el éxito en el salto largo, que son: 1), motivación, 2), concentración, y 3), elevación. Cometer 4 faltas en 5 intentos el sábado en Shanghai, y un mejor salto de apenas 7.72 metros, significa un retroceso hacía el 2004. No se puede vivir del pasado, ni de los logros del 2006 al 2008, sin buscar la mejor fórmula para corregir los errores del presente. Decir la verdad no significa que estoy en contra del atleta. Tomen nota de esto. Así es

COCTEL DEPORTIVO