Panamá se aleja del Mundial: nuevo empate deja a la selección contra las cuerdas

Hoy por hoy, Panamá se estaría quedando fuera del Mundial 2026 y tampoco le alcanzaría para entrar a la repesca internacional

Un empate que sabe a derrota. Esas son las palabras que se murmulla entre los aficionados, luego de otro empate esta vez frente a Surinam por las Eliminatorias camino a la Copa Mundial de la FIFA Estados Unidos, Canadá y México 2026.

Ante miles de fanáticos, en el estadio Rommel Fernández se volvió a dejar puntos cruciales para intentar lograr ese boleto a la cita mundialista. A pesar de todos los intentos que tuvo nuestro seleccionado, no pudieron concretar cada jugada ofensiva que tuvieron.

Y es que este empate, que tiene un sabor totalmente agridulce, ha dejado a los nuestros muy golpeados, sobre todo en la tabla. La realidad es que en estos momentos Panamá no estaría clasificando al Mundial 2026, en su lugar por nuestro grupo A estaría accediendo precisamente Surinam por la diferencia de tan solo un gol.

Si bien es cierto que estamos empatados a puntos (con seis), y en el primer criterio de desempate también estamos igualados (+1), los rivales tienen un gol más anotado que nosotros y hay que recordar que los goles anotados son el segundo criterio de desempate.

Lo peor de todo, a pesar de sumar seis unidades, tampoco le estaría alcanzando a Panamá para acceder a la repesca internacional como uno de los dos mejores segundos. Costa Rica y Curazao se estarían adueñando de esos dos boletos, por lo que hoy por hoy Panamá se estaría perdiendo, una vez más bajo el proceso de Thomas Christiansen, una Copa Mundial de la FIFA.

El discurso del propio Christiansen no ha cambiado y los errores de los panameños siguen siendo los mismos. Una vez más, las equivocaciones en la marca han penalizado a Panamá. Si contra El Salvador nos salvamos, ante Surinam si se pagó el plato roto.

Un contrataque, en el que quedó mal parada la zona defensiva de los nuestros, le permitió a Surinam abrir el marcador. Panamá fue muy superior a Surinam en muchas facetas de juego, como la creación de jugadas peligrosas, tiros al arco, pases completados y sobre todo la posesión del balón. Pero de estas estadísticas no se vive de la victoria, sino de los goles.

Un equipo como el de Panamá, que llegó anotar 11 goles en apenas cuatro partidos en la Copa Oro, tan solo ha podido sumar tres anotaciones en cuatro duelos en estas eliminatorias. Como si un Panamá completamente distinto ha estado jugado estos recientes partidos en los dos últimos meses.

Lo que resulta un poco extraño de esto es la falta de ideas que tuvo Panamá durante Surinam. Muchos centros al área por parte de Eric Davis en el sector izquierdo y muy pocos remates de cabeza encontrados dentro del área.

Estadísticas entre Panamá y Surinam.

En este aspecto es cuando debe de llegar el rol del entrenador en encontrar variantes de juego, los cuales llegan también de manera tardía. Lo que nos ha demostrado Christiansen en estos duelos es que va hasta el final con su primer cuadro.

Algunos de los ejemplos claros fueron los ingresos de Omar Brown, Aníbal Godoy y Cecilio Waterman. Estos futbolistas le dieron una revolución al equipo cuando los habituales ya estaban agostados o sin ideas. De hecho, de los pies de Brown llegaron buenas oportunidades de gol.

Cuando haces un cambio es porque quieres buscar otra cosa. En ese momento, en el descanso, queríamos seguir jugando como teníamos pensado, pero aprovechamos la pausa para hacer las correcciones con los jugadores que ya estaban. Cuando hago un cambio es porque tengo claro que algo no funciona”, fueron las palabras de Christiansen para explicar sus movimientos durante el partido ante Surinam.

¿Qué le toca ahora a Panamá?

Lo mejor que le puede pasar a Panamá es que Surinam se deje algún punto en los duelos ante Guatemala y El Salvador, pero a pesar de ello Panamá tiene que ganar si o si. Ya no existe un margen de error.

Si el equipo hace los deberes, tiene que procurar hacerlo con una mayor cantidad de anotaciones superior a lo que haga Surinam en alguno de los dos duelos pendientes para superarlos en la diferencia de goles.

Aún dependemos de nosotros, pero la realidad es que si antes estaba difícil, ahora las cosas se han dificultado aún más y existe una gran probabilidad que Panamá no logre clasificar a lo que podría ser su segunda Copa Mundial de la FIFA en toda la historia.

Al equipo aún le resta visitar a Guatemala (13 de noviembre) y recibir a El Salvador (18 de noviembre) para culminar la fase de clasificación. Si algo debe hacer es Christiansen, levantarle el ánimo al equipo, a invitar a la afición a seguir creyendo y sobre todo sacar los resultados. Sumar los seis últimos puntos en disputa, sea como sea.

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