Industria se alista para seguir a Martinelli

PANAMÁ. La industria panameña de la construcción se encuentra “a plenitud de condiciones” para afrontar los planes de expansión de infraestructura pública anunciadas por la nueva administración gubernamental.

La construcción del metro en la ciudad capital, el impulso a viviendas populares con un costo menor a 30 mil dólares y la ampliación del Canal, son los principales retos que afrontará la industria en los próximos cinco años.

Voceros de la empresa Cemex dicen estar complacidos con la decisión del presidente Ricardo Martinelli de impulsar la construcción como motor de la recuperación económica local.

En esta materia, informaron que para finales de año habrán completado un plan de ampliación para incrementar la producción de clinker , insumo básico para la obtención de cemento, a un millón 600 mil toneladas anuales, lo que vendría a representar cuatro veces su producción actual.

Este proyecto está enmarcado en un macroplan de ampliación de la empresa en el país, planificado para los próximos 30 años, en donde invertirán una suma aproximada de 270 millones de dólares. Pero su rival, Cemento Panamá, no se quedó atrás e incorporó 25 camiones para transportar concreto premezclado, elevando su flota de vehículos al centenar.

En la actualidad esta compañía se encuentra realizando un proyecto de expansión que le permitirá alcanzar en los próximos meses una capacidad de producción de 1,6 millones de toneladas de cemento anuales, desde las 750 mil toneladas anuales. El aumento en la producción de arenas y gravas en sus canteras, también se encuentra en ejecución.

Para el ex presidente de la Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC), Walter Medrano, tan solo el proyecto del metro generará de dos a tres empleos indirectos por cada recurso humano contratado. A su juicio, en la actualidad la industria local estaría en capacidad para suplir las necesidades que demandarán los proyectos de infraestructura pública que mantiene en agenda el gobierno.

“En materiales, solamente habría que importar el acero que demanden estas obras. En cuanto al recurso humano, el personal cesante que ha quedado en la calle producto de la caída del sector inmobiliario y la culminación de proyectos como la Cinta Costera y la carretera Colón-Panamá, se volverá a emplear de nuevo con estos proyectos de infraestructura pública”, puntualizó Medrano.

La medida anticíclica que representa aumentar el gasto y la inversión pública cuando la empresa privada se contrae o desacelera, es una idea que apoya el economista de INDESA, Felipe Chapman.

Una vez que se logre el estímulo de crecimiento económico, con estos proyectos de infraestructura pública, “debemos retomar la disciplina fiscal, ahorrar y bajar la deuda pública” recomienda Chapman y destaca que, otra opción podría ser que el gobierno gaste menos y baje los impuestos, para dejar más dinero disponible en los bolsillos de las familias y empresas, “lo que se traduciría en un aumento de la demanda, por medio del consumo y las inversiones”.