Consejos prácticos para poner en marcha tu negocio

Tener tu propio negocio es una alternativa atractiva si eres una mujer emprendedora: te ofrece flexibilidad en el horario, te permite fijar tu propio salario y, dependiendo del tipo de empresa, te da la posibilidad de trabajar desde tu casa, lo que es una ventaja cuando tienes hijos.

Pero aunque independizarte tenga muchas ventajas, encaminarte en este proyecto no está libre de riesgos. Los retos son particularmente difíciles si empiezas de cero y no cuentas con suficiente capital semilla. Antes de montar tu negocio considera estos 5 tips que te ayudarán a tener más éxito en los primeros meses de operación.

1. Comunícate con los demás. Quizá tengas una tendencia ser reservada acerca de tus ideas, ambiciones y planes profesionales. Si estás pensando en montar un negocio, sin embargo, es muy valioso que discutas tus ideas con tu familia, amigos y vecinos —¡cuéntasela, de hecho, a quienquiera que esté dispuesto a oírte! A medida que vayas desarrollando tu idea no desaproveches ninguna ocasión de recibir consejos de los demás. ¿Piensan que hay suficientemente demanda en tu comunidad o barrio para los productos o servicios que piensas ofrecer? ¿Te apoyarían en el proyecto? ¿Cómo podrías perfeccionar los planes para tu negocio? El proceso de hablar y escuchar te ayudará a desarrollar y ajustar tus ideas, aumentando las posibilidades de que se conviertan en realidad.

No te limites a discutir esto con tus familiares y vecinos. En la medida de lo posible, intenta hablar también con los emprendedores de tu comunidad. Pregúntales qué dificultades han enfrentado y cómo las han superado. Asegúrate de compartir con ellos tus planes e ideas sobre tu nuevo negocio. Si no van a ser parte de la competencia es muy probable que te ofrezcan información invaluable.

2. Trabaja en equipo. Emprendedores con menos recursos tienen la tendencia a trabajar individualmente cuando están poniendo en marcha sus empresas. Los negocios de algunas emprendedoras surgen de la necesidad, y dicha necesidad no les deja tiempo para formar un equipo empresarial. Trabajar en grupo, sin embargo, ofrece muchas ventajas y es algo que deberías considerar seriamente.

Un equipo de trabajo aportará a tu negocio diversas ideas y experiencias. Nadie sabe hacerlo todo. Por ejemplo, al querer montar una fonda, quizá uno de los socios tiene experiencia como chef en un restaurante, otro conoce varias distribuidoras mayoristas de comida, y un tercero tiene facilidad con la contabilidad. Al asociarse, cada uno de los miembros contribuye conocimientos y habilidades complementarias, lo cual puede hacer que el negocio sea más completo y exitoso.

Adicionalmente, trabajar en equipo te ofrece la posibilidad de tener un capital semilla mayor. Si tres socias aportan $100 al inicio, las tres emprendedoras podrán juntar un capital de $300. ¡Imagínate la diferencia entre empezar con $300.00 en vez de empezar con $100! Imaginemos, alternativamente, que los gastos iniciales fueran $1,000. Para una persona sería difícil reunir un capital tan grande individualmente. Pero si te asocias con tres compañeras, el monto que cada una tendría que contribuir sería tan solo de $333.33. Trabajar en grupo te permite realizar proyectos más grandes y ambiciosos.

Obviamente, montar una empresa en compañía no es nada fácil. Por ello, es importante tener presente que aunque asociarte contribuirá ideas, experiencia y capital al negocio, también implicará que tendrás que relacionarte con más personas y negociar con visiones alternativas acerca de las metas del negocio. Cada uno de los socios va a tener sus propios planes para el negocio. La comunicación y flexibilidad, por tanto, es sumamente importante para los que deciden montar sus negocios asociándose con otros emprendedores.

3. Haz algo innovador…y también algo reconocido. Muchos emprendedores quieren poner negocios que ofrecen productos o servicios completamente nuevos dentro de sus mercados. Hay un gran potencial en esta estrategia, pero no pierdas de vista que este camino suele ser muy riesgoso.

Imagínate, por ejemplo, que una emprendedora quiere abrir un café internet en su casa. Si la mayoría de los miembros de su comunidad no tiene experiencia con computadoras, va a tomar tiempo establecer una clientela robusta. Sus vecinos van a tener que aprender a usar computadoras y a sentirse cómodos navegando en la red. Este proceso tomará algún tiempo, y por ende el negocio tomará algún tiempo en generar ingresos significativos. Por ello, es importante considerar en ofrecer también productos o servicios más reconocidos paralelamente. Por ejemplo, la emprendedora de nuestro ejemplo podría ofrecer servicios de fotocopiado y vender materiales escolares en el mismo café internet. De este modo, la comunidad conocerá su negocio comprando productos más estándares mientras se familiarizan con los servicios más innovadores que ofrece.

Una dificultad adicional de los productos innovadores es que requieren más promoción. Por esta razón, una buena estrategia de mercadeo al lanzar un producto de este tipo consiste en ofrecerlo gratuitamente para que la gente lo conozca. Sin duda, esto es un costo adicional al comienzo, pero usualmente vale la pena incurrir en el, pues permite llegar mas rápidamente a tus clientes potenciales, y genera una mayor clientela en menos tiempo. Si las productos o servicios gratuitos no interesan a tu clientela, eso te indica que tienes que buscar otro producto.

4. Haz las cuentas. Poner un negocio suele ser más complicado y costoso de lo que esperamos, pues hay gastos y situaciones que no podemos anticipar. Sin embargo, hay una gran cantidad de cosas que sí podemos prever. Investiga cuales son éstas y haz las cuentas. El primer paso consiste en hacer un estudio de factibilidad. Obtén cotizaciones de proveedores y mayoristas locales para calcular los costos de la materia prima. Haz una lista de todos los gastos previstos, incluyendo los materiales y equipos que vas a necesitar. Y no se olvide lo más importante: ponerte un salario.

Una vez hayas recopilado todos los gastos, calcula cuanto necesitarás ganar en un mes para cubrir dichos gastos. Divide este número por el número de días que piensas trabajar en el mes (si piensas trabajar 6 días a la semana, este numero será 24, pues 6 X 4=24). Este número te dará el monto que el negocio debe generar diariamente. ¿Te parece posible? Si no estás segura, vuelve a la sugerencia número uno (Comunícate con los demás). Pregúntales a los emprendedores en tu comunidad datos aproximados sobre sus ingresos diarios. Esto te dará un estimado de lo que sea razonable estimar respecto a los ingresos diarios que tu negocio generará una vez esté establecido.

5. Sé realista. Los negocios nuevos toman tiempo en generar un flujo de caja positivo. Puede que pierdas dinero en los primeros meses —o que el negocio fracase por completo. ¿Puedes tolerar tres meses de pérdidas financieras, dado tu presupuesto familiar? Si no es así, quizá este no sea el mejor momento para poner un negocio. Espera un tiempo mientras ahorras suficiente dinero que te ofrezca un panorama económico mas cómodo dentro del cual lanzar tu negocio.

Como lo hemos dicho, es esencial tener presentes consideraciones económicas. Sin embargo, también es muy importante reflexionar sobre los aspectos personales de montar tu propio negocio. ¿Realmente crees que te va a gustar administrar un negocio? ¿Disfrutarás relacionándote con los diferentes agentes que se verán involucrados en él (clientes, proveedores, socios, etc.)? ¿Crees en tu producto de verdad? De ser así, ¡te deseamos mucha suerte!

ESCUELA DE NEGOCIOS DE LA UNIVERSIDAD DE TORONTO, CANADÁ

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Independizarse tiene muchas ventajas, pero no es que se encuentre exento de riesgos. Los retos son particularmente difíciles si se empieza desde cero y no cuenta con suficiente capital semilla.