Felaban: Latinoamérica tiene oportunidades en el 'nearshoring', pero no las aprovecha

Con los 'shock' internacionales que salpican a las principales potencias, la federación recomienda a la región crear estrategias con políticas coherentes en el mediano plazo para generar crecimiento
El 'nearshoring' es una estrategia que consiste en la externalización de servicios o procesos empresariales a países cercanos.

Con la pospandemia, el mundo comenzó a vivir una euforia de crecimiento económico. Sin embargo, la guerra entre Rusia y Ucrania afectó una serie de factores, sobre todo con el tema de alimentos, con las exportaciones de granos y el petróleo.

En este contexto, Giorgio Trettenero Castro, secretario general de la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban), explicó que el panorama en general de las tres potencias más grandes –Rusia, China y Estados Unidos– se encuentra en un decrecimiento o se complica con una posible recesión, que podría tener efecto directo en los mercados de Latinoamérica.

Por un lado, dijo, ante una nula salida entre la guerra de Rusia y Ucrania, las exportaciones de energía y grano seguirán complicadas.

Mientras que con China ya no es “tan fácil” hacer negocios, porque sus exportaciones han bajado, al igual que su crecimiento. A esto se le suman los problemas que viven con el envejecimiento de su población y la deflación con la caída de los precios, que podría generar poca demanda.

Giorgio Trettenero Castro, secretario general de la Federación Latinoamericana de Bancos.

“Que China crezca menos afecta a los países de Latinoamérica porque el gigante asiático es el que más compra materia prima”, advirtió Trettenero en una entrevista con este medio.

Con Estados Unidos, confesó, ya algunos bancos prevén que entre en una recesión el próximo año, que algunos dicen que será ligera, suave y moderada. Asimismo las tasas de interés seguirán subiendo.

En medio de esta realidad global, el secretario general de Felaban cree que es el momento para que los gobiernos de Latinoamérica generen tranquilidad y estabilidad jurídica para que estás inversiones que ya no están viendo rentabilidad en China, Estados Unidos y Rusia, opten por la región para comenzar a crear oportunidades, a través del nearshoring.

“Esto podría generar que las fábricas de China puedan trasladarse tranquilamente a nuestros países para crear empleos, desarrollo de productos y exportaciones, que es lo que justamente necesitamos para crecer en las balanzas comerciales, ya que muchos de nuestros países están en negativo”, manifestó.

“Aprovechemos el nearshoring, hagamos las fábricas, adoptemos las tecnologías, capacitemos a las personas y crezcamos, de lo contrario en esta batalla comercial siempre seremos los pobres, cuando la idea es ser más inteligentes y movernos más rápido”, añadió.

Según Trettenero, este llamado se vuelve relevante porque “la región no está aprovechando ninguna de las oportunidades que tiene en el nearshoring”.

Para maximizar los resultados en el nearshoring recomendó que la región debe crear estrategias que dejen atrás el populismo, en las que no se hable de izquierda ni de derecha, sino de políticas coherentes en el mediano plazo.

También ve relevante combatir la corrupción para así mantener la independencia y la transparencia en la política, de modo que más personas crean en el sistema.

El secretario general de Felaban recordó que hace una década la región era la segunda que más crecía en el mundo. Ahora está abajo de África subsahariana. “Yo estoy muy apenado”, manifestó.

Recomendó que la región debe trabajar en pensamientos de largo plazo, o sea, qué necesitan los países y las economías para crecer en los próximos 20 años.

Todo esto tomando en cuenta que Latinoamérica es la que menos invierte en investigación, desarrollo y patentes; las cifras solo alcanzan el 0,1%.

En este sentido, Trettenero recomendó a los países llegar a acuerdos interpartidarios para comenzar a trabajar en el futuro de los países en los próximos 10 años. “Qué tenemos que hacer en 10 o 20 años para crecer junto con nuestros países vecinos, qué podemos compartir y qué podemos hacer para tener ventajas competitivas en este mundo que está tan desarrollado. Debemos evitar seguir atrasándonos y perdiendo desarrollo”, aseguró.

Bancos

El secretario general de Felaban recalcó que aunque los bancos de Latinoamérica han logrado “una buena rentabilidad”, existe la probabilidad de que se vean afectados con todos los shock internacionales que se están suscitando.

“Al final, la banca y la economía van muy de la mano. Vemos un 2024 muy complejo. Gracias a Dios nuestra banca ha trabajado fuertemente en el tema de la innovación y tecnología. Ha hecho muy buenos aportes de capital, que la han llevado a ser eficiente”, contó.

Trettenero indicó que los “buenos índices de rentabilidad” se basan en los activos y patrimonios.

Sin embargo, estimó que las cifras van a comenzar a bajar, a raíz de que los gobiernos todavía deben seguir pagando los planes de incentivos que crearon en la pandemia, y que produjeron aumentos en la deuda pública. Informó que el escenario no será negativo porque las instituciones bancarias tienen una capitalización que los respalda, pero aún así reconoció que 2023 “será un año de vacas flacas”.

“Todavía tenemos una inflación alta, que si se quita, reduciría mucho los precios. Ahora bien, con la economía globalizada todo lo que pase en las grandes potencias afectará todo el mercado”, manifestó el banquero.

Durante 2022, Felaban reportó crecimiento significativo, pero prevé que ese escenario será menor entre 2023 y 2024. Destacó que Panamá se ha comportado “muy bien” porque creció en 2022 con un 20% en su producto interno bruto.

Celaes 2023

Trettenero visitó Panamá para participar en el trigésimo octavo Congreso Latinoamericano de Seguridad Bancaria (Celaes 2023), que fue organizado de manera conjunta entre la Asociación Bancaria de Panamá y Felaban.

Este evento contó con la participación de más de 300 expertos de toda la región, que se congregaron para abordar temas críticos relacionados con la seguridad financiera en América Latina, como la migración en Latinoamérica y su impacto en los aspectos sociales, económicos y de seguridad, la transformación digital y los riesgos de fraude, la ciberseguridad y el siempre creciente desafío del ransomware, así como la influencia de la dark web en el entorno de la seguridad financiera.

Además, se exploraron conversaciones sobre las tecnologías emergentes y los riesgos cibernéticos, y se compartieron estrategias esenciales para la gestión de riesgo y la resiliencia en instituciones financieras.

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