Presidenta argentina cierra campaña electoral

La presidenta argentina, Cristina Fernández, cerró la noche del miércoles la campaña electoral por la que busca su reelección en los comicios generales del domingo próximo, con una defensa del modelo económico que encabeza y de la situación del país en un contexto de crisis internacional.

Fernández habló por espacio de media hora en el Teatro Coliseo, del barrio de Retiro de Buenos Aires, acompañada por su compañero de fórmula y ministro de Economía, Amado Boudou, de quien dijo que dará "más institucionalidad al país" en un eventual segundo mandato.

A diferencia de otros actos públicos, la jefa de Estado estuvo en el escenario junto a ciudadanos de a pie que protagonizaron sus avisos de campaña, mientras que los funcionarios fueron ubicados en las primeras filas de la sala.

La jefa de Estado repasó los logros de su gestión, iniciada en diciembre de 2007, defendió el modelo económico que encabeza, con un crecimiento del PIB previsto en 8,3 por ciento para este año, y ratificó que el país mantendrá su rumbo en un contexto de crisis global.

"Estamos en un momento complejo del mundo, donde se cayeron los íconos que trataron de convencernos de que lo que estábamos haciendo estaba mal, que teníamos que cambiar. Menos mal que no cambiamos", subrayó.

Luego de mencionar que el desempleo bajó en el país a 7,2 por ciento en el tercer trimestre del año, Fernández aseguró que en un eventual segundo mandato mantendrá las "políticas de inclusión social y de defensa de los sectores más vulnerables".

"Es un día muy especial y quiero en este año tan particular que me tocó vivir como mujer y como Presidenta agradecerle a los millones de argentinos", concluyó, en alusión al deceso de su esposo y antecesor, Néstor Kirchner, quien murió el 27 de octubre pasado.

El domingo próximo, 28,6 millones de argentinos elegirán presidente para el período 2011-2015.

En las primarias del 14 de agosto pasado, Fernández cosechó el 50,24 por ciento de las adhesiones, seguida por el diputado socialdemócrata Ricardo Alfonsín (12,20%), el ex presidente del peronismo conservador Eduardo Duhalde (12,12%) y el gobernador socialista de la provincia de Santa Fe, Hermes Binner (10,18%).

En el país austral un candidato se consagra presidente si obtiene más de 45 por ciento de los votos o más de 40 por ciento con una diferencia de 10 puntos sobre el segundo, lo que implica evitar la segunda vuelta, lo que ha llevado a afirmar a los analistas locales que los comicios del domingo próximo no tendrán sorpresa y que serán una reedición del resultado de las primarias.