Elecciones eran la “solución realista”

PANAMÁ. El secretario de Estado adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, Arturo Valenzuela, calificó el proceso electoral de Honduras de “solución realista” para acabar con la crisis y felicitó al presidente hondureño Porfirio Lobo Sosa por anunciar la formación de un gobierno que represente a todas las fuerzas políticas del país.

Según recordó Valenzuela en una entrevista telefónica, Estados Unidos condenó el golpe de Estado contra el ex presidente Manuel Zelaya y pidió su restitución como hizo la Organización de Estados Americanos (OEA). “Por eso apoyamos también la intención unánime de suspender a Honduras de la OEA”, dijo.

Ante la imposibilidad de Zelaya de regresar, comentó Valenzuela, Estados Unidos, en el marco de la OEA, busco un acuerdo entre el gobierno de facto y el de Zelaya que se materializó el 30 de octubre con el Acuerdo Tegucigalpa - San José. “Desafortunadamente, no se cumplieron todos los elementos,” añadió.

El secretario aclaró que desde un comienzo, Estados Unidos pensó que la elección era parte de la solución al problema de Honduras.

“Esta elección en sí no fue una elección armada por un gobierno de facto para blanquear un golpe. Esta elección venía de mucho antes y en ese sentido era parte de una salida necesaria, pero no suficiente”, insistió el diplomático estadounidense, enfatizando que el proceso escogido para salir de la crisis “lo avala el pueblo” de Honduras.

Valenzuela, quien el miércoles asistió a la ceremonia de juramentación de Lobo, afirmó también que el nuevo presidente muestra “buena fe para salir de la crisis”.

“El ha hecho un esfuerzo de reconciliación nacional, ha conformado un Gabinete amplio de unidad nacional que contiene, incluso, otros candidatos que compitieron con él en la elección y está llamando a la unidad, a la reconciliación y pidiendo también que se conforme el último paso del Acuerdo (la creación de una Comisión de Verdad)”, precisó.

En este sentido, manifestó su confianza en que se alcance un “rápido consenso” entre los países de la región para que Honduras retorne a la OEA, al tiempo que afirmó que su gobierno trabajará con la comunidad internacional para apoyar a Honduras.

El país centroamericano fue expulsada de la Organización de Estados Americanos luego del golpe de Estado del 28 de junio que depuso al entonces presidente Manuel Zelaya y llevó a la presidencia a Roberto Micheletti.