Universidad boliviana expulsa a subteniente acusado de descuartizar un perro

La universidad boliviana Escuela Militar de Ingeniería (EMI) expulsó a un subteniente acusado de torturar y degollar a un perro durante un curso de entrenamiento, informó hoy el rector de esa institución, coronel Álvaro Ríos Oliver.

La decisión se tomó tras realizar un "proceso interno" que incluyó la toma de declaraciones a todos quienes estuvieron involucrados "de forma directa o indirecta en este hecho", indicó Ríos en declaraciones a Efe.

"Hemos analizado esos informes y en virtud de las evidencias y las declaraciones de diferentes partes, se ha determinado que el oficial implicado en esto sea desafectado de la institución y puesto a disposición de la fuerza a la que pertenece, en este caso, al Ejército", dijo el rector de la EMI.

El caso se conoció el pasado fin de semana, cuando la organización Animales SOS denunció que un subteniente torturó y degolló a un can durante una clase de instrucción militar en la EMI.

El hecho fue repudiado por organizaciones defensoras de los animales, que protestaron en los últimos días exigiendo un castigo para el militar supuestamente implicado en el asunto.

El ministro de Defensa, Rubén Saavedra, reprochó en un comunicado "cualquier acción que derive en maltrato animal", pidió un informe a Ríos sobre el caso y anunció que se iniciará una investigación para aclarar este incidente.

Está vigente una resolución que prohíbe todo acto de violencia, explotación, maltrato y acciones que puedan terminar en la muerte de animales

Ese ministerio recordó que está vigente una resolución que prohíbe todo acto de violencia, explotación, maltrato y acciones que puedan terminar en la muerte de animales en prácticas, instrucción y entrenamientos militares.

"Quien contravenga esa prohibición comete infracciones administrativas, pero además los afectados pueden iniciar acciones civiles y/o penales en el marco de la Ley 1333 de Medio Ambiente", señala el comunicado del Ministerio de Defensa.

Ríos explicó a Efe que los oficiales llegan a la EMI becados por sus respectivas fuerzas para estudiar alguna especialidad, por lo que el militar implicado en el caso perdió ese beneficio al ser desvinculado de la universidad.

Agregó que la competencia de la EMI sobre el asunto "termina en el instante en que el oficial deja de estar vinculado" a esa institución e insistió en que ahora su situación depende del Comando del Ejército.