El Congo, un país sumido en el caos

PANAMÁ. La situación de violencia en el Congo ha hecho crisis. El caos involucra a fuerzas rebeldes, el ejército y los cascos azules.

El compromiso de alto al fuego no ha sido respetado y las organizaciones internacionales, como las Naciones Unidas, la Unión Europea, la Unión Africana se encuentran muy preocupadas por los niños e inocentes civiles, que huyen de violencia.

La cantidad de desplazados es grande y diversos entes internacionales han prometido ayuda. El mundo mira con expectativa la situación en el país africano, particulamente Estados Unidos, Inglaterra y Francia. Este último ha ofrecido enviar un contigente para tratar de aplacar los ánimos y que cese el conflicto.

Pero la historia del Congo está dominada por un panorama de guerras, dictaduras y conflictos armados, lo que no ha permitido a este país, rico en minerales como coltán, casiterita y diamantes, avanzar en su desarrollo económico hasta la actualidad.

Ubicada en África Central, la República Democrática del Congo, cuya capital es Kinshasa, era conocida anteriormente como Zaire, entre 1971 y 1997, y el Congo Belga, en la época colonial.

El Congo fue brutalmente colonizada por Bélgica y alcanzó su independencia en 1960 con su primer ministro Patricio Lamumba, ligado a la Unión Soviética, pero luego fue gobernada en forma autoritaria por el célebre Mubuto Sese Seko, quien arruinó la economía de ese país.

El derrocamiento de Seko, que involucró a una siete países africanos, entre ellos Zimbabwe, Namibia, Zambia, Angola, Chad y Sudán, además de la ONU, dejó un saldo de 4 millones de muertes y casi provoca una conflagración continental. La misma fue conocida como la Segunda Guerra en el Congo” o “La Guerra Mundial del Congo”, que terminó con el “Acuerdo de Pretoria”.

Luego de una tensa calma desde principios de la década del 2000, el Congo ha vuelto a ser escenario de violencia, en una crisis que también salpica a Ruanda.

Los intentos por estabilizar al Congo comprometieron en el 2005 a las distintas fuerzas del país a reformar la Constitución, el sistema público y la administración, además de la organización geográfica hasta el año 2010.

En el año 2006 fue escogido como presidente de ese país Joseph Kabila, quien ejercía el poder interinamente, y cuyos dos vicepresidentes, de cuatro que nombró, luchan ahora por derrocarlo.

Hace tres días se declaró un alto al fuego y la ONU instó a la guerrilla tutsi a respetarlo.

Los presidentes Paul Kagame, de Ruanda, y congoleño, Joseph Kabila, así como con "los principales actores clave" en el conflicto adquirieron un compromiso con las Naciones Unidas, mientras que el líder de la guerrilla tutsi del Congreso Nacional de la Defensa del Pueblo (CNDP), el general Laurent Nkunda, declaró un alto el fuego después de varios días de combates con las tropas gubernamentales en la provincia de Kivu Norte. A pesar del alto el fuego, el temor a nuevos combates ha llevado a que más de 65,000 personas de la región se concentren en los campos de desplazados.