Seúl y Washington inician maniobras militares y acuerdan escudo antimisiles

Más de cien aviones de combate estadounidenses y surcoreanos llevan a cabo un ejercicio de defensa área, informó hoy la Fuerza Aérea de Corea del Sur, en plena escalada de tensión en la península coreana.

El ejercicio "Max Thunder", que comenzó el pasado viernes, aunque su inicio no se ha revelado hasta hoy, durará dos semanas, con lo que concluirá casi al mismo tiempo que las maniobras conjuntas de dos meses de tierra, mar y aire "Foal Eagle".

Unos 1.200 soldados también participan en este ejercicio anual, orientado a "abrumar al enemigo" y diseñado para "responder a cualquier forma de provocación en cualquier momento y lugar", según el teniente Won In-chul, de la Fuerza Aérea surcoreana, en declaraciones recogidas por la agencia Yonhap.

Won añadió además que estas maniobras conjuntas ofrecen una buena oportunidad para mejorar las habilidades tácticas de ambos países, que son indispensables para mantener la seguridad en la península coreana.

Unos 300.000 soldados surcoreanos han tomado parte en otras maniobras conjuntas, "Key resolve" y "Foal Eagle", este año, en lo que ha supuesto el mayor despliegue hasta la fecha para estos ejercicios anuales, a los Pyongyang considera un ensayo para invadir su territorio.

Las Fuerzas Aéreas estadounidenses enviaron hoy al este de la península coreana un avión destinado a recolectar información de la atmósfera para detectar e identificar una explosión nuclear, según una fuente gubernamental citada por Yonhap.

El avión había llegado a la base estadounidense de Kadena (Okinawa, sur de Japón), a principios de mes, en plena escalada de tensión en la región después de que EEUU, en respuesta a los continuos lanzamiento de misiles del régimen de Kim Jong-un, insinuara un ataque preventivo.

El Pentágono también decidió enviar a la península al portaaviones nuclear USS Carl Vinson, que llegará a la zona a finales de abril. Corea del Norte realizó su última prueba de misiles el pasada domingo cuando lanzó sin éxito un proyectil que estalló tras ser disparado, en lo que supone el enésimo ensayo armamentístico del régimen de Pyongyang en el último año.

Escudo Antimisiles

Las maniobras militares se suman a el acuerdo cerrado este jueves por las autoridades surcoreanas y Washington  para proporcionar a las Fuerzas de Estados Unidos en la República de Corea (USFK, siglas en inglés) los terrenos adquiridos al Grupo Lotte este año con el objetivo de desplegar el sistema antimisiles estadounidense THAAD.

El terreno, de aproximadamente 300.000 metros cuadrados del total de 1,48 millones de metros cuadrados de un campo de golf y por el que el Ejército surcoreano ha intercambiado una parcela militar cerca de Seúl, ha sido ofrecido a las USFK para que operen el escudo antimisiles, informó la agencia de noticias Newsis, citando al Ministerio de Defensa.

El acuerdo se alcanzó unos 50 días después de que el Ministerio de Asuntos Exteriores arrancara las negociaciones con las USFK sobre el suministro del terreno con fines militares, en consonancia con el Acuerdo sobre el Estatus de las Fuerzas (SOFA). El resto de los procedimientos necesarios para desplegar la batería del THAAD será dirigido por el Ministerio de Defensa, incluidas una evaluación del medio ambiente y la construcción de las instalaciones dentro de la base. Esta cartera se había preparado para realizar la evaluación ambiental del lugar, ubicado en la población de Soseongri del condado de Seongju, en la provincia de Gyeongsang del Sur.

Horas antes, este mismo jueves, dos efectivos de las USFK introdujeron dos grúas de construcción, usadas en la igualación o excavación del terreno, en el campo de golf, mientras residentes locales y activistas pacifistas se enfrentaban con oficiales de policía para bloquear la entrada. Dos personas resultaron heridas y tuvieron que ser llevadas a un hospital local