Fracasos vs un cambio curricular

PANAMÁ. Cerca del 49% de los estudiantes de primer ingreso en la Universidad de Panamá (UP) reprobó la prueba de admisión para entrar en esta casa de estudios superiores.

El Departamento de Admisión de la UP reveló en un estudio que de 12 mil 116 estudiantes que presentaron la prueba de conocimientos generales, 6 mil 740 lograron el índice mínimo (1.00) para ingresar a la universidad, mientras que 5 mil 376 estudiantes obtuvieron un índice inferior al mínimo.

Según el estudio, las mayores deficiencias provenientes del nivel medio se encuentran en el área científica, principalmente en matemáticas, donde el 68.04% de los estudiantes obtuvo un rendimiento negativo.

Otro dramático aspecto es el humanístico, de acuerdo con el informe. En español el 61.24% tuvo un mal rendimiento en la prueba de admisión del 2009, cifra alarmante, si se compara con el año 2006, el porcentaje fue del 41%.

Para el vicerrector académico de la UP, Justo Medrano, es necesaria y urgente una transformación curricular de la educación media.

Una propuesta que se elaboró conjuntamente a la Universidad Tecnológica, y que desde el año pasado fue entregada al Ministerio de Educación, identifica cuatro aspectos importantes y de necesario cambio en el sistema educativo.

Incrementar los minutos en clases (de 40 a 45), aumentar las horas semanales de docencia de 36 a 39, reducir de 68 a 5 la cantidad de bachilleratos y eliminar algunas materias del currículo.

Según el vicerrector Medrano, se justifica el cambio, pero advierte que debe haber “disposición de todos para que se logre”, porque “siempre sale un grupo o gremio docente a decir que eso no se puede hacer”.

El planteamiento de Medrano produjo escozor en Mario Almanza, miembro de la Asociación de Maestros Independientes, quien calificó de “aberrante” la propuesta de transformación curricular que manejan los docentes universitarios.

El dirigente explicó sus razones. “No se puede eliminar materias de cultura general, porque la educación responde a un criterio de formación integral. Parece que lo que quieren es formar obreros y no gente que piense”. Según Almanza, el gobierno saliente “no ha tenido voluntad” para atacar la situación.

En tanto, Andrés Rodríguez de la Asociación de Profesores, advierte que la propuesta educativa “fue la misma que presentó durante su campaña polítca la candidata del PRD, Balbina Herrera Araúz”, de allí que considere la oferta de cambio curricular “una fórmula politizada e inaceptable”.

El deterioro en la calidad del producto que envía la educación media hacia la universidad está latente en el pensamiento de la profesora Maira Franceschi de Thompson, directora general de Admisión de la Universidad de Panamá.

Con 35 años de docencia superior, la profesora está de acuerdo en que esta transformación “es urgente”, porque más del 80% de los estudiantes que ingresan por primera vez a la Casa de Méndez Pereira proviene del sector público, “y llega a la universidad con conocimientos totalmente desfasados”.

Esto implica, según la educadora, “que el propio docente se actualice y acepte este cambio por su bien y el de los estudiantes que forma”.

El 1 de septiembre se inicia el proceso de admisión en la UP.