Grupos olvidan disputas y se unen en las protestas

COLÓN. Colón, zona de violencia, de pandillas, donde no podías pasar de una esquina a otra porque ya estabas peligrando, hoy es un solo territorio. El gobierno ha logrado lo que, en muchos años, leyes e intentos de rehabilitación de los jóvenes pandilleros no: unir a las pandillas, explica el consultor y especialista en trabajo con pandillas Gilberto Toro.

Y los chicos atraviesan de un lado a otro, de una calle familiar a otra que antes era prohibida sin temor a que los mate la pandilla contraria, sienten que es una lucha unánime, continúa Toro.

El único temor hoy son las balas del gobierno. Y es que con estos ataques a la población, a la ciudad que es patrimonio histórico panameño, han logrado unirnos sin importar la cuna, continúa el dirigente y promotor de prevención de la violencia Ovidio Aguilera.

Lo único que esperamos es que luego de que esto pase esa unidad funcione para rehabilitar y no para perjudicar más, dicen los colonenses.

Para la profesora Nora Santizo, se venía haciendo un trabajo y un esfuerzo con estos grupos durante mucho tiempo y se había logrado un pequeño avance que ahora se puede perder con el desorden originado y revertir todos esos logros significativos.

Santizo comparte la preocupación de Toro, que una vez que terminen los enfrentamientos con el gobierno y la policía, ¿quiénes serán los enemigos de estos grupos?