La floración de los guayacanes se convierte cada año, entre los meses de marzo y abril, en un espectáculo visual que pinta de amarillo el horizonte de...
Actualizado
- 22/11/2013 01:00
Creado
- 22/11/2013 01:00
PANAMÁ. Poco después del medio día, la rutinaria y ensordecedora normalidad de Vista Hermosa fue interrumpida por una ráfaga de disparos.
PANAMÁ. Poco después del medio día, la rutinaria y ensordecedora normalidad de Vista Hermosa fue interrumpida por una ráfaga de disparos.
Por supuesto, eran inesperados. Dos hombres que viajaban en una moto atacaron un vehículo Toyota Fortuner blanco. A bordo del auto viajaban tres personas, venían de almorzar en el restaurante El Jorón de Vista Hermosa, a unos metros de distancia.
Ariel Tuñón, hasta ese momento gerente de Comunicaciones de Cable Onda, falleció al recibir 16 disparos; sus dos acompañantes resultaron seriamente heridos.
Mientras la ciudad se estremecía por este asesinato al estilo de los sicarios colombianos, las autoridades intentaban preservar la escena del crimen, y el resto de la capital se agobiaba por un tranque de dimensiones extraordinarias.
Al mismo tiempo, conocedores del tema no dudaron en alzar la voz, para advertir que esta podría ser una consecuencia directa de los desaciertos de la Policía en el último mes.
Figuras como Jaime Abad y Mauricio Nelson coinciden en que cuando la policía entra en estas disputas con la sociedad se desenfoca y es ahí cuando el crimen hace de las suyas.
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