'La Mazinger' no soportó los 6 litros de silicona inyectados

Su ansias de ponerse ‘guenona’, superó su cordura y desencadenó su muerte.

La noche del miércoles, Ernesto Valencia White, de 33 años, y conocido como ‘La Mazinger’, falleció cuando se practicaba una operación estética.

Valencia White era un travesti que se dedicaba a la prostitución, en la avenida de Los Mártires (4 de Julio), en Ancón.

Su amigo, Armando Escobar, contó con lujos de detalles, lo que sucedió en la trágica operación.

Relato

‘Ella salió de casa a las 7:00 p. m. y la cirugía empezó a las 10:00 p. m. Quien la operaba era alias ‘Tatiana’, una travesti colombiana que se graduó en Medellín. Ella le cobraría 200 dólares por la operación’.

‘La Mazinger’, yo y otra amiga habíamos comprado la silicona, 6 litros en total. Cada litro nos salió en 200 dólares y era silicona ecuatoriana. Yo cogí miedo y no me la puse’.

‘A ‘La Manzinger’ le habían dicho que no se operara, porque ya tenía mucha silicona en el cuerpo, unas 12 libras, pero no hizo caso, así que escribió una nota donde se responsabilizaba por cualquier cosa que saliera mal’.

‘La operación se realizó en el hotel La Torre, arriba del Mesón de Pérez, en la habitación 21’.

‘A ella le inyectaron los dos primeros litros de silicona en la cadera, y empezó a ponerse mal. Ella era asmática’.

‘Yo estaba allí y de un momento a otro empezó a agonizar. La misma silicona como que la comenzó a ahogarla. La cirujana exigía que la dejáramos en el hotel hasta las 6:00 de la mañana, pero no aguantamos, así que bajamos y buscamos a los policías, que llamaron al 911’.

‘La camilla no podía subir al hotel así que la bajamos cargada; ya estaba casi muerta’.

‘Posteriormente, fue al médico (Hospital Santo Tomás) y ya no aguantó más’.

‘Tatiana’ (la cirujana) fue retenida por la Policía, pero después la soltaron. Ella ha operado a bastantes travestis. La mayoría son los que operan en la 5 de mayo. Ella siempre opera en el hotel’.

Pasado

‘La Mazinger’ vivía en El Chorrillo, específicamente en el albergue La Estancia.

En el pasado, trabajaba como ‘hormiguita’ en la antigua Dirección Municipal de Aseo Urbano y Domiciliario (Dimaud).

Su trabajo

Compañeras de labores de ‘La Mazinger’ dijeron que su negocio de prostitución era rentable.

‘Cobramos 45 balboas por cliente, y en una buena noche podíamos tener dos o tres’, señaló.

Añadió que la hoy difunta, de manera muy seguida, optaba por inyectarse silicona, o hacerse mejoras en su cuerpo, ya que siempre quería estar a la vanguardia.