La CSS, con el IVM en rojo y millonarios bienes abandonados

Muros desteñidos y ventanas rotas dan la bienvenida a la Calzada de Amador. Son las casas que una vez habitaron soldados estadounidenses que pasaron a manos panameñas al cumplirse en 1999 los Tratados Torrijos Carter.

Al principio, estos bienes fueron manejados por la Autoridad de la Región Interoceánica (ARI), hoy Unidad Administrativa de Bienes Revertidos (UABR), adscrita al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).

Según el documento del Registro Público, la finca de trece hectáreas, identificada con el N°207514, tiene actualmente un valor de $173 millones.

Este terreno fue traspasado el 10 de enero de 2002 a la Caja de Seguro Social (CSS) con el objetivo de aportar desde el Estado al Programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM).

En el solar hay seis casas abandonadas. El objetivo de pasar estas propiedades a la CSS era que se vendiera la finca y se creara un fideicomiso para el IVM.

En 2002, la Autoridad de Bienes Revertidos le asignó al bien transferido un valor de $56. 9 millones.

Entre otras propiedades de las áreas revertidas que también pasaron a la CSS está el conjunto de edificios de Clayton, donde actualmente funciona la sede administrativa central de la institución.

El nuevo director de la CSS, Alfredo Martiz, al igual que sus predecesores, aseguró que tiene la intención de usar los activos de la institución que aún no aportan beneficios.

‘Es plata perdida si no se utilizan esos bienes para sumar al programa IVM', puntualizó Martiz al respecto.

EL COSTO - BENEFICIO

Según el MEF, el valor del terreno de trece hectáreas —que en su momento se estimó en $57 millones— se ha triplicado, aunque no hay un avalúo actualizado del valor del metro cuadrado en la zona. El MEF calcula que el terreno cuesta $173 millones.

Este aumento, según el economista Juan Jované, exdirector de la CSS, es un beneficio por la revalorización del terreno, aunque se debe analizar cuáles son los pasos convenientes en este momento.

Jované señala que la venta de los terrenos podría ayudar al problema del IVM, pero no lo resolvería en su totalidad.

‘La pérdida no ha sido tan grande, porque el terreno se ha revalorizado y este sería un buen momento para vender esos terrenos porque, a diferencia de esos años, hay menos inflación, pero es conveniente hacer un análisis del costo-beneficio', comentó Jované.

El economista señaló que durante su gestión como director se concentraron en el aumento salarial de los jubilados y pensionados.

‘En la CSS hicimos un convenio con el Gobierno para realizar los aumentos. La mitad de los fondos la ponía la CSS y la otra mitad, el Gobierno, que estaba sin recursos. Allí se le asignan a la Caja el edificio de Clayton, unas tierras cerca del Biomuseo y la finca de trece hectáreas', recuerda.

El exdirector propone hacer uso de los terrenos e investigar por qué no se hizo ‘nada' con esos bienes en las administraciones posteriores a la suya.

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CIFRAS DEL IVM

En 2014, cuando Estivenson Girón asumió la dirección de la CSS, afirmó que el programa se quedaría sin fondos en 2025

Las reformas para salvar las futuras pensiones y jubilaciones se convocaría después de la apertura de la ampliación del Canal, expresó meses antes el presidente Juan Carlos Varela.

A casi tres años de la gestión de Varela, aún no se ha convocado al diálogo para modificar la ley de la CSS.