Sindicato pide a la Asamblea concretar citación a Etesa

Trabajadores de las empresas eléctricas, junto a la diputada Zulay Rodríguez, del PRD, reclamaron ayer a la presidenta de la Asamblea Nacional, Yanibel Ábrego, que defina la fecha de citación del gerente de la Empresa de Transmisión Eléctrica (Etesa), Gilberto Ferrari, y del administrador de la Autoridad de los Servicios Públicos (Asep), Roberto Meana.

Los trabajadores reaccionan ante el tiempo transcurrido desde el mes de enero, cuando se aprobó la citación, y que hasta la fecha no se ha concretado.

Tanto Rodríguez como la dirigencia de los trabajadores reaccionaron de esta forma ante lo que consideran un retraso injustificado.

Jorge Alegría, dirigente del Sindicato de los Trabajadores de las Empresas Eléctricas, afirmó que estos funcionarios deben dar muchas explicaciones al país.

El secretario general del sindicato indicó en conferencia de prensa que hay una serie de explicaciones que estos funcionarios le deben al país.

En primer lugar, dijo que deben explicar el porqué de la insistencia en el acto de la licitación para la construcción de la cuarta línea de transmisión para la conducción de energía eléctrica.

Tanto Alegría como la diputada Rodríguez dijeron en conferencia de prensa que hay que explicar por qué se insiste en la licitación, en lugar de dejar que sea el gobierno que resulte electo en mayo próximo, el que tome la decisión.

El dirigente de los trabajadores dijo que, a estas alturas, la tercera línea de transmisión de energía no está trabajando ni siquiera al 60%; entonces —alegaron— no se justifica una nueva licitación.

A la vez, señalaron que se debe explicar por qué hay una marcada insistencia en mudar las oficinas administrativas de Etesa, cuando quedan tan pocos días para que concluya la actual administración.

Alegría informó que cuando se privatizó el antiguo IRHE, la administración de Etesa recibió un globo de terreno en la vía Ricardo J. Alfaro valorado en más de $11 millones, donde se pretendía construir la sede de la institución. Dijo que incluso se presentó una maqueta, pero el terreno fue vendido y a la fecha no se sabe qué se hizo con el dinero.

Lo más grave es que a estas alturas, según Alegría, se pretende alquilar las instalaciones de un edificio que no se ha terminado de construir y por el cual se pretenden pagar $10 millones.

La diputada Rodríguez remarcó que todo esto lo deben explicar los funcionarios ante la Asamblea Nacional y que por eso debe concretarse la citación ante el Pleno legislativo.