Belgis Castro desafió el sistema

PANAMÁ. Luego de que el ex ministro, Belgis Castro violara la medida de casa por cárcel otorgada por la Corte Suprema de Justicia (CSJ), el fiscal segundo anticorrupción Ramsés Barrera ordenó nuevamente su detención.

Castro se encontraba en la residencia de sus padres ubicada en el distrito de San Miguelito. El fiscal explicó que desde allí sería conducido a la DIJ y quedara ahora a órdenes del Sistema Penitenciario, que decidirá el centro de reclusión a donde será enviado.

Barrera, aclaró que el oficio No. 1543 dirigido al director de la DIJ, Javier Castillo, por el magistrado ponente Alberto Cigarruista, es la prueba suficiente de que Castro conocía de las medidas a que debía acatar. (Ver notificación).

El fiscal decidió revocar la medida otorgada por la CSJ, luego de que a Castro se le viera el domingo en un evento político del Partido Revolucionario Democrático (PRD), de donde él es miembro, y se presentara en la mañana del lunes a un programa de televisión y se le vio en grabaciones en diferentes medios de televisión donde se mostraba en lugares públicos.

Esto provocó reacciones desde el presidente hasta la procuradora se mostraron molestos por lo actuado por el ex ministro.

El presidente Ricardo Martinelli dijo que "me siento igual de consternado que todos los panameños al ver cómo se presenta en un evento político una persona que debe estar preso en su casa o en La Joya. El presidente agregó que la actitud de Castro constituye una mofa al pueblo panameño”.

La procuradora Ana Matilde Gómez por su parte señaló que "Es un desafío peligroso, porque la justicia confió en él y le sustituyó la medida más grave que es la detención preventiva por otra sustitutiva no debió desafiar a la autoridad”.

Castro se presentó también el lunes ante la Corte, para dar la dirección a donde supuestamente iba a residir. En este caso el ex ministro dio dos, la de sus padres en San Miguelito y la suya en Chiriquí.

El ex ministro pretendía residir en ambos lugares, mientras que en el oficio que él mismo firmó el sábado 10 de octubre se especificaba la obligación de residir en un lugar determinado dentro de la jurisdicción respectiva.

Su libertad sólo duró cuarenta y ocho horas.