Las dos visiones de un proceso

PANAMÁ. Las dos solicitudes enviadas a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) por parte del procurador encargado de la Procuraduría de la Administración, Nelson Rojas, aún esperan por ser resueltas, y mientras ese momento llega, en el camino surgen diversas opiniones acerca del contenido de los documentos.

En la vista número 10-10-P del 5 de enero de 2010 enviada por la Procuraduría de la Administración, Rojas solicita le permitan indagar a la procuradora para “agotar el sumario” de las investigaciones por la querella interpuesta por el ex fiscal Arquímedes Sáez.

En otra nota, la 09-10 P del mismo día, Rojas solicita a la Corte se suspenda a Gómez, sustentada en la necesidad de garantizar que su condición de procuradora general no afecte situaciones concretas que pudieran presentarse para la adquisición o autenticidad de pruebas que faltan por recabarse, al mismo tiempo, pide declarar una medida cautelar de impedimento de salida del país a Gómez.

Sin embargo, para la defensa de la procuradora, la solicitud de indagatoria, ausente de una fecha propuesta, es un claro indicio de que lo que se busca es una intención de separación.

Juan Antonio Tejada, uno de los abogados de la procuradora dijo a La Estrella que el haber elevado a la Corte Suprema de Justicia una "solicitud de separación", sin haberle permitido a la procuradora la previa oportunidad de descargo, mediante la práctica de una indagatoria, visibiliza que el objeto del proceso, no es otro que sacarla del cargo, a la brevedad posible.

Fuentes judiciales aseguraron a La Estrella que incluso se están realizando investigaciones en las cuentas bancarias de la procuradora.

Pero los abogados de Sáez aseguran que se ha querido mezclar la política con sus intenciones de probar que la procuradora cometió un delito al violar un artículo de la Constitución Nacional.

Y conforme transcurren los días en espera de una decisión de la Corte, la jefa del Ministerio Público se mantiene firme en su convicción de no renunciar

Gómez asegura que la única forma en que pueden sacarla del Ministerio Público es destituyéndola, porque ella no va a renunciar, y que sólo podrán destituirla mediante una condena por delito doloso.

La procuradora, incluso está dispuesta, a que le hagan un juicio público.

Para el analista político Edwin Cabrera la próxima semana se perfila aún más confusa de lo que ya está el ambiente. Cabrera aduce que el proceso podría tomar mucho tiempo, por lo complejo del caso, y porque la procuradora “proyecta todas las intenciones de defenderse”.

Agregó que aunque “ve euforia política, lamentablemente la situación carece de una análisis político adecuado”.