Panamá, envuelta en lío por asilo a Hurtado

PANAMÁ. Mientras que en su visita a Honduras, el ex presidente de Colombia Álvaro Uribe guardó silencio sobre el asilo otorgado a la ex jefa del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) de Colombia, María del Pilar Hurtado; en Panamá, Uribe —quien fue cuestionado de igual manera por los periodistas en la mañana del jueves— trató de evadir los cuestionamientos de los comunicadores, argumentando que se encontraba en el país porque en la tarde daría una conferencia, invitado por ex alumnos del INCAE, donde dijo que hablaría de los valores democráticos.

Tras la insistencia de los medios tanto nacionales como extranjeros que se encontraban presentes, Uribe utilizó la salida más rápida a sus respuestas ‘he trabajado por Colombia con amor, con valor, con honor y por eso estoy en Panamá’, de esta manera, el ex presidente colombiano evitó hablar del asilo concedido por el presidente Ricardo Martinelli a la que fuera la ex jefa de Seguridad de su gobierno.

En una entrevista a TVN canal 2, el ex presidente Uribe fue cuestionado nuevamente por el asilo a Hurtado y en todo momento evadió las preguntas relacionadas con el tema. Primero, al ser preguntado por las órdenes de chuzadas, el ex mandatario señaló que ‘la batalla mía ha sido una batalla con firmeza y con la constitución en la mano’; y a la pregunta del asilo a María del Pilar Hurtado, refirió a su entrevistadora al comunicado que envió la noche del 23 de noviembre.

PROTESTAS

La visita de Uribe a Panamá, en medio de las críticas al asilo de Hurtado, ha generado todo tipo de reacciones, entre ellas, la que ocurrió al finalizar su intervención en el Hotel Sheraton. A su salida, lo esperaba María Victoria Delgado, una compatriota que le gritó todo tipo de insultos desde ‘asesino, criminal’ hasta ‘genocida’. Uribe solo dejó ver una sonrisa antes de tomar el elevador que lo llevaría a su próximo destino.

Más temprano, estudiantes de la Universidad de Panamá realizaron por segundo día una protesta en la vía Transístmica en rechazo al asilo que le concedió el gobierno panameño a Hurtado.

En tanto, Gilma Camargo, representante de Derechos Humanos en Panamá, envió una carta al procurador suplente de la Nación, Giuseppe Bonissi, solicitándole la detención del ex presidente Uribe, por supuestamente encontrarse en desacato por una orden de la Corte Federal del Estado de Alabama para rendir testimonio en el caso presentado por 500 familias colombianas por el asesinato de sus familiares conocido como ‘falsos positivos’.

La lluvia de rechazos continúa. El ex canciller Samuel Lewis Navarro dijo que el asilo era sagrado y se utiliza para ayudar a un país amigo o para proteger a un perseguido, y el gobierno aún no ha explicado las razones.