‘El que siembra vientos’

De todos los grupos sociales, el más pobre y marginado es el indígena. Es el grupo donde todo gobierno necesita manejarse con el mayor cuidado posible, el costo político puede ser muy alto. En septiembre pasado, los disturbios de Changuinola produjeron pérdida de popularidad del Presidente, Ricardo Martinelli y su gobierno. La lección no fue aprendida. La consecuencia es un nuevo bajón y esta vez el saldo a favor, es escaso. El gobierno necesita ahora calcular muy bien sus siguientes movimientos. Tiene la oportunidad de ceder a corto plazo y que todos ganemos a largo. Es inconveniente para el país que la clase política se debilite de parte y parte, como parece estar sucediendo con gobierno y oposición. Es caldo de cultivo para el radicalismo. El gobierno requiere, más que nunca, actuar con visión de estadista. Quien quiera tomar ventaja política de la actual situación, siembra vientos y cosechará tormentas.

ENCUESTADOR