Juzgado emite oficios a las instituciones de seguridad en caso “mochilas”

El Juzgado Decimoquinto Penal de Panamá, a cargo del juez Leslie Alberto Loaiza, emitió los oficios No. 1090, 1091, 1092 y 1093, donde pone en conocimiento a la Dirección de Investigación Judicial, del Servicio Nacional Aeronaval, del Servicio Nacional de Fronteras y de Migración, que mediante el Auto Mixto No. 1 del 10 de julio de 2018, ordenó la detención preventiva, captura y abrió causa criminal contra Adolfo “Chichi” De Obarrio Manzini, por los delitos de peculado, corrupción de servidores públicos y fraudes en los actos de contratación pública, en perjuicio del Programa de Ayuda Nacional (PAN), por el caso conocido como “mochilas”.

A los directores de Investigación Judicial, del Servicio Nacional Aeronaval y del Servicio Nacional de Fronteras le solicita capturar y filiar a órdenes del Juzgado Decimoquinto Penal de Panamá a De Obarrio, y que una vez se haga efectiva su detención preventiva, se le sea informado que se encuentra vinculado a la comisión de los delitos antes mencionados y sobre su derecho a la asistencia de un abogado.

En tanto, al jefe de Migración le pide que una vez entre al país sea puesto a órdenes de la Policía Nacional, y se haga efectiva la orden impartida por dicho despacho.
La investigación, por posibles sobrecostos en la adquisición de mochilas escolares, por un monto de B/.12 millones, aproximadamente, se inició el 5 de septiembre de 2014, por la Fiscalía Segunda Anticorrupción.

El 23 de mayo de 2018 se celebró la audiencia de colaboración No.2 del señor Rafael Guardia Jaén y el Ministerio Público, donde este último señaló que Guardia accedió al acuerdo de colaboración No. 8, donde se declaró penalmente responsable de los delitos de peculado, corrupción de servidores públicos y fraude en contratación pública.

De acuerdo a la declaración indagatoria y al acuerdo de colaboración, Guardia Jaén señaló que Abraham Williams, quien era su asistente, y la persona que le daba el seguimiento a los documentos para las ejecuciones de los programas, y que el señor Adolfo De Obarrio era la persona que le daba instrucciones al señor Guardia, y quien escogía qué empresas debían ser contratadas, es decir que ambos participaron en el ilícito.