Verifique el rumbo, General

General Paredes, con el respeto que siempre le he tenido, me sería de mucho pesar que una figura como usted, con una excelente hoja de servicio, al final de su carrera pública, pueda ser considerado el tonto útil de la oposición, usted no se lo merece. Los tontos útiles, se desechan una vez conseguidos los objetivos.

Dicen los juristas que uno no está preso por lo que hace, sino por lo que dice. En un mea culpa (así lo han catalogado los periódicos) televisivo, manifestó, palabras más palabras menos: “dejamos de hacer lo que era nuestro deber, hubo una omisión”, no dudo que esta es su verdad. Entonces qué debe seguir; quizás ir a la Procuraduría para decir que por omisión y responsabilidad suya no se culminó un proceso o pedirle disculpas a su subalterno de ese entonces, pues por no hacer lo que debió como superior, hoy hay una gran confusión (eso es tarea de los abogados).

Creo en las felicitaciones de los panelistas de Trocha Abierta al usted hacer su mea culpa, pero tenga cuidado con los “cabezas calientes”. No vaya a ser que busquen a Gorriti (peruano) o a Fasseto (argentino), porque parece que no hay periodistas investigativos en Panamá, e investigue cuánta perdida económica tuvo cada periódico cuando los cerró con la frase “desde ya” y quieran ser resarcidos económicamente o cualquier otro invento contra su persona.

Le recomiendo que si estos mea culpa van a seguir, hable a nombre propio, no de la Institución (usted no es la Institución) y no involucre a otros. El general Omar Torrijos y el coronel Rodrigo García, por no existir, no se pueden defender de lo que usted afirma, así mismo el coronel Flores no ha corroborado su intervención televisiva.

Confieso que no me agrado que mencionara a un jefe y amigo personal, a un caballero y pundonoroso oficial como es el coronel (R) Florencio Flores; suficiente daño le hizo al no permitirle retirarse con honores, al darle el golpe institucional que le dio. Jamás le he escuchado al comandante Flores hablar de usted, la reciprocidad sería elegante.

En los últimos 4 años nadie ha podido hacer que el ex director de la Policía Nacional, Carlos Bares, hable algo que trastoque la Institución. Al contrario, hizo una excelente demostración de don de mando cuando le dijo al fiscal, en el caso Posada Carriles, al defender al comisionado (R) Arnulfo Escobar, que como jefe él dio la orden y él era el único responsable, por consiguiente asumía su culpabilidad.

Deseo que la historia lo recuerde como el comandante que trajo bienestar a la Institución, programas de vivienda, implementó los 30 días de vacaciones, preparó para la vida civil en el IFARHU a todo el que iba a jubilarse, y que no se le recuerde como quien por querer ser siempre protagonista, estar en la escena, ser siempre consultado, perdió el rumbo, se tergiversaron sus palabras, se manipuló su sana intención y fue utilizado.